De Lagasca99 AL CIELO
Entramos a un espectacular ático del proyecto residencial Lagasca99, cuyo interiorismo ha imaginado Belén Domecq a partir del original trabajo del arquitecto Rafael de La-hoz.
L agasca99 es un proyecto residencial irrepetible por motivos diversos. Promovido por Lar España, ocupa una manzana entera –y exenta– en el madrileño barrio de Salamanca. Los propietarios disfrutan de servicios propios de un hotel de cinco estrellas y cumple con los más altos estándares en construcción sostenible. Además, ofrece 44 apartamentos de configuración única de entre 330 y 700 metros cuadrados, comercializados por Colliers International Spain.espectaculares son sin duda los áticos dúplex, uno de los cuales ha imaginado ya listo para entrar en él la interiorista Belén Domecq. Fiel a su estilo, ha jugado con cuidados equilibrios. “El magnífico proyecto de Rafael de La-hoz encaja con total naturalidad en la visión de nuestro trabajo; es un edificio contemporáneo al mismo tiempo que respeta la elegancia clásica de su entorno”, explica la decoradora, admiradora confesa de la
trayectoria del arquitecto cordobés: “Ha dejado un sello inconfundible en Madrid y con este proyecto quizá se lleve los mayores aplausos de su carrera”. La complicidad entre ambos profesionales es evidente al recorrer el ático, del que el arquitecto elogia sus espectaculares vistas: “Dan a norte, que son las que más me gustan. Desde la terraza, de 300 metros cuadrados, observas a un paso la Iglesia de San Francisco de Borja, un poco más allá, las Cuatro Torres y, al fondo, la sierra de Madrid. Sus propietarios serán gente muy feliz aquí arriba”. Una escalera de caracol y un ascensor privado conectan los dos pisos, cuyos dormitorios disfrutan de amplios closet. Añade Nicolás Alcíbar, gerente del proyecto, “que las calidades, en consonancia con todo el proyecto, son de primera línea: cocinas Siematic, griferías Zucchethi, armarios Rimadesio, puertas acorazadas Oikos, tarimas Lignum Elite…”. En la cumbre del confort, Lagasca99.
“Es un edificio contemporáneo que al mismo tiempo respeta la elegancia clásica de su entorno”. BELÉN DOMECQ