Lujo TOTAL
Sofisticación, exquisitez y diseño. Así es el hotel SOFIA Barcelona, un universo de exclusividad y, sobre todo, de buen gusto.
Cuando cada detalle, cada estancia y cada bocado es ideado con maestría y delicadeza, lo que se logra es crear una obra de arte total. Un hito al alcance de muy pocos y que en la Ciudad Condal tiene un referente, el hotel SOFIA Barcelona. Este establecimiento, ubicado en la zona más exclusiva de la metrópoli mediterránea, ofrece a sus huéspedes una estimulante experiencia única desde el primer instante. Cuando se cruzan sus puertas, se entra en un microcosmos de diseño elegante repleto de calidez, un rasgo que se complementa con las últimas tecnologías en materia de domótica en cada una de sus 465 habitaciones. En sus diferentes espacios gastronómicos, las variadas propuestas culinarias se maridan con unos ambientes y experiencias sorprendentes. SOFIA Be So se distingue por ser mucho más que un restaurante. Es un viaje sensorial que arranca en el SOFIA Bar y que prosigue con las cajas aromáticas del sumiller y creador de armonías François Chartier. El comensal, una vez ha seleccionado qué olor le seduce más, disfruta de una cena personalizada elaborada por el chef Carles Tejedor que varía según su elección olfativa. Por su parte, ZUU es un impresionante live dinner experience en el que show y alta cocina se alían para crear un binomio divertido y sabroso que está sublimando la noche barcelonesa. www.sofiabarcelona.com
Coderch o el Grupo R, ya en la posguerra, lo secundaron. “La forma en la que GATPAC entendía el diseño, usando fórmulas sencillas con un nuevo carácter visual, nos sigue sorprendiendo, todavía tiene un punto de modernidad —asegura Escámez, que añade—. Para proyectar el futuro es imprescindible mirar hacia el pasado, ir de su mano y reinterpretarlo. En mis obras hay referencias a materiales vernáculos de esta zona como el palisandro, el ciprés, las cerámicas manuales vidriadas o mates y los cristales soplados, unificados con un paisajismo acorde a nuestro clima”. Recuperar antiguos oficios y producir en el lugar en el que se construye, diseña o decora es otra de las claves, como bien saben las marcas de lujo, que se han dado cuenta de que no hay nada más exclusivo que lo hecho a mano. Loewe, gracias al empeño de su director creativo Jonathan Anderson, lo sabe muy bien. Su premio a la artesanía Craft Prize, da buena fe de ello. Y en las antípodas, Marc Morro, que para reeditar la silla Salvador de
mano y de la exposición Cuidado Diseño. Artesanía española contemporánea en el Centro Cultural de la Villa Fernán Gómez de Madrid hasta el 10 de marzo—. La cerámica también está cambiando, aparecen nuevas técnicas con inspiraciones orientales o del norte de Europa, y hay colaboraciones sorprendentes, como las de La Cartuja de Sevilla con Isaac Piñeiro o el trabajo del artesano de la madera Paco Luis Martos, que ha llevado sus réplicas de artesonados mudéjares de La Alhambra a las grandes mansiones de Los Ángeles. El futuro está en las sinergias entre tradición y nuevos diseños”. Concluyen Jaume e Irene del estudio TED’A: “Avanzamos mirando hacia atrás, pero también a la izquierda y la derecha, contribuyendo a reforzar la identidad del lugar. Las cosas con calma, salen mejor”.
“Avanzamos mirando hacia ATRÁS, contribuyendo a reforzar la identidad del lugar”. TED’A ARQUITECTES