CASA MILLER
(1952) Columbus, Indiana
“Crecí en una pequeña ciudad al oeste de Pensilvania, y la familia de mi mejor amiga vivía en una enorme casa victoriana color mostaza de Dijon. Dentro era ultramoderna, con una alfombra en el salón que parecía hundirse para componer unos sofás. Era elegantísimo. Al estudiar interiorismo volvieron los recuerdos de jugar en aquella mansión y las ganas de regresar una y otra vez. Por eso me emocioné cuando entré en la casa que Eero Saarinen diseñó para los Miller en Columbus, Indiana. Tenían hijos y les encantaba reunirse en el salón, en un gran asiento bajo el nivel de suelo, su “hoyo para conversar”. Me gusta imaginar a los afortunados niños del vecindario que pudieron pasar las tardes allí y que se sintieron tan inspirados como yo. De alguna manera descubrieron que lo seguro no siempre es lo más hermoso ni la mejor manera de vivir”. KELLYBEHUN.COM