Silencio mediático
Las guerras empiezan a disminuir cuando se conocen sus efectos. Y entonces las fábricas de armamento disminuyen. Pero en España parece que las noticias sobre las guerras en el mundo o los bombardeos de Arabia Saudí en Yemen, no van con nosotros. Estas noticias se ocultan o se les da una importancia relativa, preocupados por asuntos nacionales como los presupuestos o la independencia de Cataluña. Es decir, lo que ocurra fuera de nuestras fronteras parece no existir. El periodista Tomás Ocaña, de Telemadrid, ganador de tres premios Emmy, habla de cifras
estremecedoras ante un país que se considera respetuoso con los derechos humanos. En este año se han enviado desde España 5.300 toneladas de bombas, desde los puertos de Bilbao y Santander, a Arabia Saudí, que está causando en Yemen una crisis humanitaria sin precedentes. Es un país que no admite la libertad religiosa. La ONU duda de que sus continuos bombardeos como los del pasado mes de octubre no sean intencionados.
Por eso quizá hace falta promover en España un periodismo más sano e independiente, para sacar a la luz lo que se pretende ocultar y poner sobre el tapete noticias que nos interesan más, porque muestran un ocultamiento de lo que puede poner en crisis las paradojas y contradicciones de nuestros gobernantes. ¿Será que el periodismo crítico vende menos?