LA PERCEPCIÓN SOBRE LOS INGRESOS EN 2020
Según el Informe “Perspectivas del Consumidor” de Kantar, que de manera trimestral analiza la confianza de los españoles en torno a la economía propia y del país, se mantiene una mayoritaria percepción de que los ingresos seguirán en el mismo nivel durante 2020. Un 62% lo cree así, con una opinión que se ha visto reforzada en el último trimestre de 2019 con un crecimiento del 6%. A pesar de ello, cabe destacar que un 21% de la población española cree que sus ingresos pueden bajar o declara no saber cómo evolucionarán. Ambas percepciones han crecido más de un 25% respectivamente en ese último periodo del año.
En línea con este crecimiento de las opiniones más negativas o conservadoras sobre los ingresos futuros, en el último trimestre de 2019 ha habido un importante repunte en la creencia de que habrá más desempleo en 2020 (un 30% más). Paralelamente, bajan las opiniones optimistas (-23%) e incluso las más moderadas (-13%) que esperan que el desempleo descienda o al menos se mantenga igual. A pesar de esto, la percepción del empleo personal es mucho más positiva que la del desempleo en términos generales y 8 de cada 10 consumidores creen que hay pocas posibilidades de perder el empleo propio. Así, 2019 finalizaba con valores positivos (5,3) en el Índice de Comportamiento del Consumidor, situándose al mismo nivel que en el primer trimestre de 2019. Con este, ya son 4 meses consecutivos en los que este indicador se mantiene en positivo, marcando una clara tendencia de mejora. Este crecimiento puede venir explicado por factores externos, como el incremento del empleo total, el hecho de que en 2019 los salarios hayan crecido por primera vez desde 2008 por encima del IPC, y la reducción del tipo de interés de las hipotecas. Estos aspectos inciden en un incremento de los recursos económicos disponibles en los hogares y, por lo tanto, en la posibilidad de mantener los mismos niveles de consumo. Y todo ello antes de que se hubiese aprobado el Salario Mínimo Interprofesional.
De esta forma, crece la valoración de la situación económica actual del hogar (+6 puntos), uno de los factores que conforman el índice de Comportamiento del Consumidor. Sin embargo, cuando ponen la mirada en el futuro, los consumidores son mucho más conservadores e incluso observamos una ligera caída en el indicador “Previsión situación económica del hogar” (-4 puntos). Parece que 2020 se mira con cierto recelo, y, de hecho, es llamativa la diferencia entre cómo se percibe la economía doméstica frente a la economía del país, siendo actualmente de 72 puntos, la mayor distancia entre ambos factores desde enero de 2017.