Cómo viven los millennials.
Los nacidos en la generación de los ochenta y los noventa fluyen en espacios prácticos, en los que imprimen su identidad. Buscan la felicidad en interiores flexibles, versátiles, ecológicos y cómodos que les permitan pasar de una actividad a otra sin mayor problema. Obligados a exprimir cada uno de los metros de su casa, se han especializado en soluciones creativas libres de complejos. Y haciendo gala de su pragmatismo, convierten el inconveniente de compartir, en una virtud.
——POR CRISTINA ROS
El término millennial fue acuñado por primera vez por el escritor William Strauss y el consultor Neil Howe en el libro Millenials Rising, The Next Great Generation, e incluye a los nacidos a partir de 1982. La horquilla se cerraría en el año 2000. A la derecha, proyecto Bondi Junction, de Alexander & CO, en Sídney.
LA fotografía de los millennials no sale demasido nítida, y no es porque sea la generación con un mayor número de miembros. Empezando por que muchos de ellos no se reconocen como tales, cuesta hacerse una idea de cómo son verdaderamente y de cómo viven, en conjunto. Aún así, y pese a ellos, hay algunos rasgos que los identifican.
Aunque existan muchas interpretaciones, partiremos de la base de que los millennials son aquellas personas nacidas en las décadas de 1980 y 1990. A grandes rasgos, son los/as que, al teminar la carrera, se encontraron con la bofetada de la crisis en toda la cara. Un golpe del que algunos se recuperaron colgándose la mochila y recorriendo el mundo (viajar es su prioridad, según las encuestas) o bien permaneciendo en su lugar de origen, pero creando sus propias reglas. Es la vía que tomaron los fundadores del estudio de arquitectura AGORA, nacidos a principios de los 80, que, una vez terminados los estudios, decidieron ir a buscar los proyectos y no esperar a que llegaran. Una filosofía que siguen aplicando cada día y que les da buenos resultados.
Si en el trabajo, los millennials han tenido la necesidad de cambiar los códigos preestablecidos y crear un nuevo entorno, en el ámbito de la casa también han proyectado su propia personalidad. Y así, lejos de tener como prioridad comprarse un inmueble–como la generación X, la anterior a la de ellos–, han convertido el hecho de compartir en algo... llevadero. En este sentido, los millennials se han erigido como una generación muy práctica, que prefiere vivir en una casa grande, luminosa y bonita, aunque sea compartida, que en un cubículo, aunque sea para ellos solos. Si para un miembro de la generación X, el hecho