Janio Abreu Necesito la música para respirar
El joven instrumentista, arreglista, compositor y productor musical despliega sus ansias de experimentación con el jazz y otros géneros.
Carisma, honestidad y fuerza. Es la combinación perfecta, aderezada con buenas energías y el especial don de la comunicación, que hacen de la obra musical de Janio Abreu Morcate un referente obligado en Cuba.
Enmarcar en el jazz —en el ya reconocido jazz cubano— el quehacer de este instrumentista, compositor, arreglista y productor musical puede ser, a todas luces, una visión demasiado reduccionista. Ciertamente él, egresado del Instituto Superior de Arte en 2008 con Título de Oro, luego de cursar estudios en la escuela de música Manuel Saumell y en el Conservatorio Amadeo Roldán, ha transitado por este género constantemente, pero lo ha hecho, sin duda, porque ha podido desplegar sus ansias de experimentación con otros géneros de nuestra tierra y de otras latitudes.
Clarinete y saxo tenor, de vez en cuando clarinete alto y el reciente debut con la flauta, el saxofón alto y el clarinete bajo en su entrega discográfica Hijo del viento (Bis Music, 2019) definen el apego de este talentoso joven cubano a la creatividad musical, interesado en demostrar que la buena música, libre de etiquetas, es mejor.
Puede hablar durante horas sin que su conversación deje de ser fluida, coherente y empática con cualquier interlocutor. Tal vez esa es la esencia que cuida mantener en sus interpretaciones, porque no se escapa de la seducción quien está en uno de sus conciertos e incluso en un ensayo. Romper barreras con el público lo entusiasma, porque no necesariamente los «entendidos» son los únicos que pueden deleitarse con una propuesta como la suya.
Aire de Concierto es su agrupación, fundada en 2007 con un formato que incluye bajo/contrabajo, guitarra, batería, percusión menor y claro, saxofón o clarinete. No fue casual, seguramente, su concepto fundacional, porque así, en el
transcurso del tiempo, ha podido fusionar con el jazz elementos de la timba cubana, el changüí, el blues, la samba y la macuta.
Antes su virtuosismo se canalizaba en el cuarteto Clarinetes de Ébano. Desde entonces ya soñaba con la posibilidad de desprenderse de lo superfluo para darle cabida a lo sensorial, a lo que no puede ignorarse desde todos los sentidos. Sus álbumes Con clarinete y De ida y vuelta dan fe de ello.
Janio Abreu Morcate necesita la música para respirar, eso es evidente. Y lo mejor es que ha podido llevarla a diversos países, la ha compartido con otros relevantes músicos en Cuba y continúa haciéndola crecer. Justamente, gracias a la dicha que la vida le regaló durante el Festival Internacional Jazz Plaza 2018, ofreció un magistral concierto junto al clarinetista y saxofonista norteamericano Víctor Goines, instrumentista y arreglista de la Jazz at Lincoln Center Orchestra, y otros invitados, que hoy puede disfrutarse en formato DVD, con el título Nuestra herencia musical, bajo la dirección audiovisual de José Manuel García Suárez.
Ahora recoge éxitos con su fonograma Hijo del viento, nominado a los Premios Cubadisco 2019, en el que se incluye el danzón Mi bella Habana, pieza reconocida con el primer premio de composición del Encuentro Internacional Danzonero Miguel Failde in Memoriam. Además, asumió la dirección musical de un concierto que en el mes de junio, en el Teatro Martí, lo hizo confluir en la escena con Habana Clásicos y otros invitados.
Inquieto, vital, de mente intrépida y fecunda, le seguimos la pista por las redes sociales y en sus presentaciones en vivo, porque solo así podremos contagiarnos con su energía, convertida en magia dulce a través de la música.
I NEED MUSIC TO BREATHE
Charisma, honesty and strength: that is the perfect combination, seasoned with good vibes and the special gift of communication, which make the musical work of Janio Abreu Morcate a must reference in Cuba.
Setting within the bounds of jazz - in the already renowned Cuban jazz - the work of this instrumentalist, composer, arranger and musical producer may be, by all accounts, a too reductionist vision. Certainly, after graduating from the Instituto Superior de Arte in 2008 with a Merit Diploma, and studying at the music school “Manuel Saumell” and at the “Amadeo Roldán” Conservatory, he has been in touch with this genre constantly. But he has done it, without a doubt, because he has been able to unleash his drive for experimentation with other genres of our land and other latitudes.
Clarinet and tenor saxophone, occasionally alto clarinet and the recent debut with the flute, alto saxophone and bass clarinet in his “Hijo del viento” record (Bis Music, 2019) define the attachment of this talented young Cuban to musical creativity, interested in showing that good music, with no labels, is best.