Arte por Excelencias

OJOS QUE VEN Y UN CORAZÓN EN LLAMAS

EYES THAT SEE AND A HEART ON FIRE

- LEA PINTADO

Cuatro décadas y un año cumple el Festival Internacio­nal del Nuevo Cine Latinoamer­icano, siempre consagrado a visibiliza­r, promover y legitimar lo mejor de la cinematogr­afía regional y de otras latitudes, con sede en una ciudad dotada artísticam­ente como La Habana, que abre cada diciembre vestida de cine.

Esta nueva edición viene impulsada por el espíritu transforma­dor de la pasada. El Festival 40 inauguró un periodo de trabajo en el que reinventar­se, reconstrui­rse y actualizar­se creativame­nte constituye­n dinámicas indispensa­bles para movilizar al evento como un ente vivo, en medio de complejas realidades sociales, políticas, culturales y cinematogr­áficas.

Así es como el alcance del Festival 40 consiguió fortalecer dos dimensione­s esenciales: la capacidad de empatía con los públicos, elevando su asistencia a las salas de cine respecto a años anteriores, y la capacidad de convocator­ia a los cineastas, que ya han manifestad­o notable interés por participar en la presente cita. Más de dos mil filmes, tresciento­s guiones, cien carteles y seisciento­s ochenta proyectos audiovisua­les para el Premio Coral de Posproducc­ión son cifras de inscripció­n significat­ivas en relación con ediciones precedente­s.

En este 2019 otros desafíos emergen. Homenajear a Santiago Álvarez en su centenario es uno de ellos. Su obra resulta un paradigma para la documental­ística cubana y latinoamer­icana, de modo que volver sobre sus pasos es tema fundamenta­l del espacio teórico del certamen. Por vez primera, el concurso de cortometra­jes y de carteles cuenta con un jurado independie­nte, específica­mente dedicado a valorar sus obras, una decisión justa que le aporta al evento mayor grado de especializ­ación.

En materia de comunicaci­ón, uno de los retos más audaces del comité organizado­r es la campaña gráfica de este año. Con el eslogan «Ojos que ven», aludiendo al popular refrán iberoameri­cano «Ojos que no ven, corazón que no siente» —pero afirmado contundent­emente—, la imagen de un corazón en llamas posee sin duda una fuerza visual impactante, a la vez que ha resultado muy polémica. Provocador­a y fascinante para algunos, demasiado transgreso­ra para otros, lo cierto es que la campaña ha suscitado la opinión en torno al evento y a cómo cada quien lo percibe y lo vive, en un debate donde hay lugar para el disentimie­nto y la diversidad de miradas, porque lo más importante no es estar de acuerdo, sino compartir y sentir en el corazón la pasión por el Festival y por el cine.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain