José Antonio Luque “No soy de vaticinar, pero veo una final España-Italia”

José Antonio Luque será el narrador de los partidos del Europeo Sub-21 que arranca hoy en Mediaset. Acompañado por Pablo Pinto y Julen Guerrero como comentaristas y Sergio Santos, periodista de Diario AS.

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Mediaset ya se volcó el año pasado con el Mundial de Rusia y ahora con el Europeo Sub-21, ¿cómo se sigue el ritmo de una competición así? —Pues con mucho interés. Primero porque es una competición de grandísimo nivel. A mí me parece que es una de las grandes competiciones futbolísticas a nivel mundial junto con un campeonato del Mundo de absolutas o con una Eurocopa de absolutas. Yo creo que después de esas dos, ésta es la gran competición. Es verdad que es Sub-21 pero buena parte de los jugadores que compiten son ya realidades más que promesas. Muchos son titulares en sus equipos, equipos de super élite, así que con mucho interés y con la intensidad que requiere una competición como esta. Afortunadamente para los espectadores van a poder verlo íntegramente en Mediaset, como sucederá el próximo año con la Eurocopa y a finales de este verano con el Mundial de Baloncesto. Es un honor y un privilegio poderle contar a la gente una competición de este nivel. —También es el futuro de la absoluta, ¿cómo se vive emocionalmente?

—Pues deseando que tu selección lo haga bien, por supuesto. Valorando que el equipo de

Luis de la Fuente es muy bueno y uno de los candidatos al título. Es verdad que es una competición muy difícil, prácticamente cada partido es una final y es complicadísimo hacerse con un puesto incluso en las semifinales. Pero estoy seguro de que vamos a hacer un buen papel. España tiene un grupo complicado sobre todo por tener que enfrentarse a la anfitriona. Pero también es verdad que si nosotros somos conscientes de que los italianos tienen un buen equipo, ellos seguramente también están preocupados por tener que enfrentarse a nosotros. —¿Qué selecciones ve como finalistas en este Europeo? —Pues a mí me gustaría que una de ellas fuera España, sin duda. Y no firmaría ahora mismo, que el último partido de España en este campeonato fuera la final y además, el mismo partido que el primero, o sea, contra Italia. Me parece que Italia tiene un gran equipo, además juega en casa. A mí me gusta mucho la concepción de plantilla y los jugadores que maneja Italia y, por su puesto, me gusta, deseo y quiero que la Selección española esté ahí. Así que pues mira, no soy muy de vaticinar pero voy a apostar por una final España-Italia.

—¿Qué es para usted lo más difícil de ponerse delante del micrófono y narrar?

—Pues no fallar. Yo soy muy perfeccionista en eso y en todas las tareas profesionales. Y bueno, lo que buscas es estar al nivel, estar a la altura y pensar en el espectador que es al que te diriges, al que transmites el acontecimiento y que espera mucho de ti porque al final tú eres el vehículo que le cuenta lo que está pasando.

—Y la complicidad con los comentaristas...

—Eso forma parte de la retransmisión, evidentemente los comentarios son muy importantes, pero lo fundamental es lo que está pasando en el partido. Intentas no cortarles, pero si en algún momento hay un punto álgido del partido, te ves obligado y no pasa nada. Seguro que el comentario puede esperar pero el penalti se produce en el momento. Estoy convencido de que no es un problema ni para la retransmisión ni para el comentarista ni el narrador.

—Canales en abierto y de pago con el deporte, ¿de qué manera afecta o beneficia?

—Esas son las circunstancias a las que ha ido llegando cada deporte. Y cada uno, además, tiene su particular historia. Sería muy largo de analizar lo que ha ocurrido con los deportes. Pero esa es la realidad, son los tiempos que vivimos. —¿Cómo ve el surgimiento de plataformas como DAZN?

—Bueno, forman parte de la oferta televisiva y creo que cuanta más oferta tengan los aficionados, mejor para poder seguir el deporte. Sobre todo porque les da la posibilidad de elegir dónde ven los acontecimientos. Siempre que haya oferta deportiva es bueno para nosotros, para los profesionales y también para la afición.

Los jugadores que compiten son ya realidades más que promesas”