Reacción obligada en La Romareda
Después del bochorno de Huesca, al Zaragoza sólo le vale la victoria ante el Rayo Vallecano
El Real Zaragoza abochornó a los suyos en el derbi aragonés y ahora está obligadísimo a vencer esta tarde para empezar a cerrar la cicatriz de El Alcoraz y no abrir una crisis de consecuencias imprevisibles. El equipo de Natxo González no gana desde hace cuatro jornadas y está a tres puntos de la frontera con el descenso, un escenario muy peligroso ante la visita a La Romareda del Rayo Vallecano, que viene remontando posiciones gracias a su poderío ofensivo y está sólo a un punto del playoff.
Los veteranos del vestuario (Zapater, Toquero, Mikel o Cristian Álvarez) no han dejado de hacer autocrítica pública durante toda la semana, poniendo el dedo en la llaga de lo que sucedió en el derbi ––“Fuimos a Huesca muy relajaditos y dimos vergüenza”––, pero esperando que el descalabro sirva a todos de lección y no se vuelva a repetir.
El problema ahora es que el aficionado ha perdido mucha de su fe en este grupo y vuelve a estar entre escéptico y descreído. Y eso siempre es peligroso cuando se juega en
Peligro El equipo vallecano sólo ha perdido un partido fuera de casa
La Romareda y ante un equipo como el Rayo de Míchel, que únicamente ha perdido un partido de seis fuera de Vallecas y su delantera ya ha cantado 18 goles. Un equipo con De Tomás, que fuera objetivo del Zaragoza este verano, Manucho o Chori Domínguez es como para tomárselo muy en serio, y más en el caso del Zaragoza, que ha perdido eficacia en las dos áreas y sólo ha ganado un encuentro como local.
Natxo González prepara cambios, alguno obligado como el de Delmás por el lesionado Benito, pero podría volver Ángel al lateral izquierdo y hasta Febas, cuya ausencia en Huesca se dejó notar muchísimo, Eguaras y Vinícius Araújo. El brasileño se disputa un puesto con el suizo Buff en la media punta.
Por su parte, el Rayo encadena seis jornadas sin perder. Si bien las tres últimas han terminado con empates, algo que aspira hoy a cambiar para volver a meterse en puestos de promoción. Míchel tiene la baja de Lass por enfermedad, volverá a defensa de cuatro, tras adaptar su dibujo la pasada semana al del Albacete y podría apostar al final por Abdoulaye.