Sin Costa, con necesidad
Llega LaLiga de nuevo como una venda que colocar sobre la última herida, la eliminación de Copa. Las Palmas será el rival y, curioso, en los últimos años ha sido constante ante el Atleti: ser reconstituyente. Si llegaban los rojiblancos con crisis al partido, victoria y ésta se acababa. Griezmann lo hacía sin gol y lo mismo: marcar y a otra racha. En la primera vuelta ya ocurrió: goleada rojiblanca en Gran Canaria (1-5) y a olvidar el gris empate en la jornada inaugural ante el Girona. Costa se entrenó en el Wanda al ritmo que sus compañeros, como en este ejercicio con Griezmann, pero no jugará.
Ahora la situación es parecida. También el Atleti empató ante el Girona en la última jornada. Hoy recibe a un Las Palmas penúltimo en la tabla, pero fortalecido por una última victoria, la de la pasada semana ante uno de los equipos sensación de esta Liga, el Valencia. Es la primera con Paco Jémez. Quizá el inicio de un camino que los canarios buscan continuar en el Metropolitano.
Abrazado por la cúpula de su nuevo
Al alza Los amarillos llegan tras vencer al Valencia y Paco insistirá con su idea
estadio, precisamente, el Atlético se ejercitaba ayer por última vez. Éste, cada vez más suyo, menos extraño, necesita seguir llenándose de victorias. El último giro llegó en la propia convocatoria: Costa no llega. Sí estará Juanfran, por el sancionado Vrsaljko, y también Vitolo, de reencuentro en reencuentro. Si el martes fue con Nervión, hoy será con el equipo puente entre aquello y esto, aquel del que era hasta diciembre, Las Palmas. Esta vez no hay ‘pacto de caballeros’. Esta vez está convocado, aunque jugar, de inicio, lo hará Correa.
Las Palmas, con once puntos, luchará por hacer lo que nunca antes se hizo: salvarse. Pasa por ganar hoy. Paco apostará por lo que funcionó. No tocará lo del pasado fin de semana. La segunda parte ante el Valencia es el ejemplo. Intensidad, compromiso. Algo ha sido clave. Peñalba sólo en el pivote para liberar a Viera. Más disparo, más colmillo. El de Simeone se llama Griezmann, y para Gameiro, quizá sea la última oportunidad de hacer de sus goles vendas.