Los jugadores se citaron para la Decimocuarta
La plantilla rodeó a Cristiano y cantó con el estadio: “¡Quédate!”
EI Bernabéu, en penumbra. Las 21:49 horas. La fiesta empieza. Con todos ustedes Los Reyes de Europa en fútbol y baloncesto. La Decimotercera en fútbol y la Décima en baloncesto. Fueron los “héroes de Belgrado” los primeros en saltar al terreno de juego. Con Laso a la cabeza fueron desfilando uno a uno. Para Rudy, Doncic, Llull y Reyes fueron las primeras grandes ovaciones.
El madridismo enloqueció a las 22:05 horas. “La Decimotercera ya está aquí”, se proyectaba en todas las pantallas gigantes: 1, 2, 3, 4… así hasta llegar a la 13. La de Kiev. La tercera consecutiva… “Como no te voy a querer si eres campeón de Europa una y otra vez”. Zidane, el entrenador que ha ganado tres Champions en dos año y medio, salió aplaudiendo al madridismo. Sonriente, sencillo, como es él. Tras él su equipo técnico, su hijo Luca, Ceballos, Kovacic, Mayoral, Achraf, Llorente, Theo...
Isco tiene conquistado al madridismo y lo sabe.
Otro de los querídisimos es Asensio.
Se le notaba alucinado. Y el tercero que encandila es Lucas Vázquez,. Casemiro sintió ser imprescindible en este Madrid. La noche fue un poco de Bale. El Bernabéu se rindió al galés. También a Modric. Ese Lukita que hace brillar a este equipo.
La fiesta siguió con Kroos, Nacho, Varane, Vallejo y… Carvajal. Mandando besos, pero con ojos tristes. Se reservó sólo para la fiesta tras no estar en las celebraciones. Tras él, Keylor. Fue el primer nombre de la noche que cantó el Bernabéu. Le adoran. Y Benzema, que gusta o desespera, era feliz.
A las 22:31 saltó al césped “el mejor jugador del mundo”, con la bandera de Portugal como capa, mostrando con sus dedos sus cinco copas de Europa y besando dos veces el escudo del Madrid. “¡Cristiano, Cristiano...!”. Con los pelos de punta, Marcelo también besó su escudo. Él y Cristiano repitieron ese bailecito que nos regalan a lo largo de la temporada.
Ramos fue el último. En pie para recibir al capitán. Acunando a la Copa, besándola. La Orejona le conoce bien. Arrodillado ante su público, mostrando que el Madrid es para él el número uno. Capitán de las tres Copas de Europa consecutivas. Leyenda ya del madridismo. Juntos en la plataforma presenciaban un espectáculo de fuegos artificiales.
Ramos, Zidane y Marcelo tomaron la palabra, perola afición esperaba a Cristiano: “Esta afición que nos da tanto cariño en todos los partidos. Es un orgullo jugar en el club más grande del mundo”. Ahí le rodearon sus compañeros. “Cristiano, quédate, Cristiano quédate”, grito que coreó todo el Bernabéu. “Esto para mí es muy importante, me siento a gusto con vuestra pasión, los futbolistas que me motivan, el cuerpo técnico para ser cada vez mejor. Es mi ADN. Soy así. 1, 2, 3. ¡Hala Madrid!”, justo la frase con la que empezó su historia de amor con el Madrid en 2009.
Para despedir la fiesta en el Santiago Bernabéu, entonaron el himno de la Décima. Y dieron la vuelta de honor, los niños, las sonrisas, las fotos de recuerdo… y el manteo a Zidane. Con el deseo de esperar nuevos éxitos.
Baloncesto Recibieron un sentido homenaje antes que los hombres del fútbol
Cristiano “Es un orgullo jugar en el club más grande del mundo y brillar”