Oxígeno para el Tenerife ante un Racing que toca fondo
Reparto de puntos entre Cádiz y Alcorcón en un partido disputado y con alternancias. Stoichkov adelantó a los visitantes al poco de comenzar la segunda parte y Lozano igualó en el 68’. Con este resultado, el Cádiz deja en cinco puntos la distancia con el playoff.
El Alcorcón llegaba al Carranza con su condición de único equipo de Europa invicto a domicilio y con hasta ocho cambios en el once. Por su parte, el Cádiz también mostraba su fondo de armario, con algunas variaciones.
El encuentro comenzó sin dominador claro y con un ritmo pausado. El Alcorcón quiso la pelota en los primeros compases, pero su juego lento no inquietaba la meta de Cifuentes. Del Cádiz tampoco hubo nada destacable en los primeros minutos.
Jurado zarandeó a los suyos en el 23’, tras un cambio de ritmo por banda en el que apuró la línea de fondo, centró y Bellvís salvó, antes de que Nano Mesa llegara a rematar. No hubo más que destacar en una soporífera primera mitad.
Tras la reanudación, los visitantes salieron con otro aire y golpearon primero. Jugadón de fútbol sala de Ernesto por la banda, que mete el balón al área. Sandaza intenta rematar, pero el balón sale rechazado. Stoichkov, el más listo, lo recoge y engatilla para batir a Cifuentes.
A partir del 60’, el Cádiz empezó a apretar. Álex se ofreció y llevó la batuta. Esto, unido a que el Alcorcón dio un paso atrás, hizo que llegara el gol local en el 68’. Perfecto envío desde la derecha del madrileño y gran remate de cabeza de Lozano, para poner el empate en el marcador. Poco después los locales reclamaron como penalti, un derribo de Elgezabal sobre Iza cuando el lateral enfilaba la portería. A ojos de Muñiz Ruiz no fue suficiente para decretarlo.
En los últimos minutos el partido se volvió loco con continuas idas y venidas, en las que el cansancio se hizo evidente. El empate final hizo justicia a lo visto sobre el campo.
■ Al final, el Racing va a tener que dar las gracias porque el calendario postcoronavirus sea a uña de caballo. Tres meses así, virtualmente descendido y echando sal en la herida cada partido, sería un calvario para el racinguismo. Y más si el equipo empieza regalando goles como el que cocinaron Luca y Buñuel, que aprovechó muy bien Joselu.
Ahí se acabó el partido. El Tenerife hizo lo que quiso, incluso pudo controlar el ritmo del choque. Sólo sufrió en el alargue.
Distancia
El Cádiz deja al Almería, tercero en la clasificación, a cinco puntos