Katir cambia la historia
El muleño bate con 7:27.64 el récord de España de 3.000 en Gateshead Posee también los topes de 1.500 y 5.000
Mo Katir ha dado un viraje total a la historia del atletismo español en 33 días. Del 10 de junio al 13 de julio ha batido tres récords nacionales, posiblemente los más prestigiosos. Primero fue el de 5.000 (12:50.79 en Florencia), el pasado viernes llegó el de 1.500 (3:28.76 en Mónaco) y ayer fulminó el de 3.000 metros lisos (7:27.64) en Gateshead, en lo que iba a ser la Diamond League de Londres. El español más rápido en tres kilómetros era Isaac Viciosa con 7:29.34. Ahora lo es este murciano de Mula, de 23 años.
A Katir le traía buenos recuerdos la pista de Gateshead, a orillas del río Tyne. Allí, en mayo, en una tarde muy lluviosa, ganó su primer 5.000 internacional en una Diamond (13:08.52). Fue el prólogo del torbellino Katir, que de nuevo dio un show espectacular en este enclave al norte de Inglaterra. No buscaba la plusmarca, pero la liebre y sus rivales sí, sobre todo el ambicioso australiano McSweyn. Y como Katir quería ganar. Récord al canto, por debajo de 2:30 el kilómetro.
Tiró primero el británico Adam Clarke, el objetivo era a minuto por vuelta. En el primer kilómetro se cumplió. 2:30. Luego llegó el turno del keniano Kibet. Se escapaba la plusmarca. 2:33 el segundo 1.000 y la liebre se retiró. McSweyn se quedaba al frente. Tocaba reventar en el último kilómetro. Y Katir lanzó un ataque demoledor en la última vuelta, a falta de 300. El último giro fue de 55.82, brutal para ritmos tan elevados. 7:27.64, plusmarca nacional y le quitó el récord del meeting a Gebrselassie. “¡No escucho a nadie, cómo estoy!”, gritaba a las cámaras ante un McSweyn derrotado (7:28.94).
Tres plusmarcas. Este triplete de récords españoles (1.500, 3.000 y 5.000) lo tuvo en su día José Luis González, allá por los años 80, cuando a Katir le quedaba tiempo para nacer (lo hizo en 1998).
Tampoco vivía el verano en que Cacho hizo su tope de 1.500 (en 1997). Tenía apenas seis meses cuando Viciosa hizo el suyo en Oslo (agosto de 1998). Ahora es propiedad de Katir, amasador de récords. Otro plusmarquista nacional, Fernando Carro (8:05.69 en 3.000 obstáculos) corrió esta carrera lisa de Gateshead. Fue undécimo con 7:41.13, en forma para Tokio.
Focos. Los focos apuntan a Katir al que cuando le asalta la fatiga, poca, piensa en esas interminables series en soledad en torno al lago de Mula. Allí y con subidas mensuales a la altitud de Sierra Nevada se ha fraguado el atleta del momento. “He entrenado como un animal y, día a día, he visto que puedo ser de los mejores del mundo”, escribe en sus redes. Kilómetros, muchos, muy rápidos, horas en soledad, para escribir, pensar, soñar.
El plan de Katir ahora pasa por estar unos días en casa, junto a su familia. Y después le tocará coger un avión rumbo a Tokio, donde esperan los Juegos y el 5.000. Va cuarto del ranking mundial. Y viendo su velocidad terminal en 1.500 y 3.000, puede aspirar a todo. La cabeza de Katir pide calma, pero sus piernas están en las nubes.