Cuando un mismo fichaje llega a costar un 8,5% más
La disparidad fiscal entre autonomías condiciona el mercado
Javier Tebas lleva tiempo insistiendo en la necesidad de una rebaja de la fiscalidad para los futbolistas. Su leitmotiv es que “si perdemos a los mejores talentos, caerá el valor audiovisual del producto y generaremos menos riqueza para el país”. En España, tras excluirles de la Ley Beckham, los futbolistas no tienen beneficios fiscales y, entre otros detalles, se regula que las comisiones de los agentes se tributen como IRPF y no por el impuesto de Sociedades. En Inglaterra, Italia o Alemania la fiscalidad da mayor respiro a los actores del fútbol. Pero, además, en España no todos los clubes y futbolistas pagan los mismos impuestos.
Valencia, Villarreal, Levante o Elche pagan de IRPF un 8,5% más que Real Madrid, Atlético, Getafe o Rayo. Así, un futbolista que negocie una ficha neta de 1,5M€, a un club valenciano le costaría 2,3M€ brutos y a uno madrileño 2,1M€; mientras que a Sevilla, Betis, Cádiz o Granada, 2,2M€. Por Griezmann, por ejemplo, cobrando lo mismo en neto (21M€), el Atlético pagaría de impuestos 945.000 euros menos que el Barcelona.
Las fronteras territoriales entre comunidades son también fiscales y cada gobierno autonómico tiene su propio tipo de gravamen, con un porcentaje de margen para subirlo y bajarlo. Así, en lo que se refiere al IRFP, en cada tramo de renta hay una tarifa estatal y otra autonómica y la suma de ambas dicta el porcentaje a tributar. La Ley 11/2020 de 30 de diciembre de Presupuestos