Que imaginación
João Félix, expulsado ● Kondogbia y Trippier se van con molestias ● El Athletic sigue sin perder
ello, el Atleti volvió a lanzarse sobre Unai Simón con ganas de apretar el interruptor. Lo intentó Correa, esta vez de cabeza. Respondió Williams, con una contra. Corrió como si costara 200 millones, definió como si no valiera ninguno, horrible. Justo después se daba la vuelta el Cholo, buscando a tres hombres en chándal capaces de cambiar el partido. Suárez, Carrasco y Herrera (por Kondogbia, Griezmann y Lodi). Enseguida se sumaría otro: João.
Marcelino replicaría quitando a Raúl García (despedido por un Metropolitano en pie) y dando entrada al pequeño de los Williams. El Athletic dio un paso atrás. El Atleti tres adelante, con ímpetu. Ese que aún le falta a Suárez. Una contra lo evidenció: cuando se quedaba mano a mano frente a Unai Simón prefirió buscar a Carrasco que correr otro metro. La ocasión se emborronó. Botas de plomo, falta de oxígeno,
Desde que se inaugurara en septiembre de 2017, el Metropolitano ha sido fortín. El Atleti sólo ha perdido seis partidos. Esta temporada, sin embargo, la de la vuelta del publico, el Atleti no arranca. Tres empates seguidos. Ante el Villarreal y el Athletic en Liga, ante el Oporto, en Champions. 34 años pesando en las piernas. Entonces llegó el barro.
Si Trippier se iba, cojo, enseguida Simeone perdería a João. El dejà vú. El árbitro vio su mano atrás pero no la falta anterior, clara, que le hizo Vencedor. También lo siguiente: la respuesta, tan pueril como inconsciente, João, el gesto del loco. Amarilla, roja. El Atleti con diez. Y pudo ganar el partido al final, con un topetazo de Llorente que Unai Simón desvió al palo. Tanto como perderlo: Villalibre, a las nubes en otra clara ocasión. Simeone se iría mascando el empate, tercero seguido. Del unocerismo al cerocerismo, con la mejor delantera posible. Mientras, el tiempo cumplido y Gil Manzano a su show: mano al bolsillo y amarilla. Giménez, última víctima. Sin aclararse el barro, los decibelios.
Para que todo esto fluya (sigo echando más minutos de un centrocampista en detrimento de un central), el Cholo necesita que recuperen sensaciones el escuadrón de los pequeños detalles, João Félix, Griezmann y Suárez, esos que marcan la diferencia, y que definen en los últimos metros ante equipos disciplinados y estructurados. Una pena que todo se desconectase con la expulsión de João (no seré yo quién justifique la acción del portugués y más manifestándose ante el colegiado con megáfono a vista de todo el mundo). Pero habiendo estado en el verde, con algún acto parecido en mi currículum, hay veces que te confundes gravemente a la hora de hacer ese tipo de gesto, así que no exageremos con las conclusiones definitivas. Eso sí: debe de ser una lección la cual no te haga falta repasar.