“¡Sí, sí, sí, la Copa ya está aquí!”
El Athletic aterriza en Bilbao y prolonga la fiesta de los campeones ● Hoy hará las maniobras para sacar la gabarra del dique y ponerla en la ría
La Copa ha vuelto a casa. A la residencia del Athletic, el que fue el rey del torneo durante muchos años, hasta que le arrebató esa corona el Barcelona. Reposa en Bilbao, preparada para descansar en las vitrinas de un club con 125 años de historia. A primera hora de la tarde de ayer aterrizó con el equipo en Loiu y siguió su travesía del gozo infinito. La de la final del sábado en Sevilla ante el Mallorca es la número 25, según el club vasco. El trofeo ganado en los penaltis en La Cartuja viajó en el avión de vuelta y bajó las escaleras de la aeronave que llegó al aeropuerto de la capital vizcaína portado por los capitanes Muniain y De Marcos. "Sí, sí, sí, la Copa ya está aquí", lanzaban voces roncas. El grito de guerra ha sido desde la madrugada del sábado la canción Julen is on fire, reversionada como Julen no falla, lololololo, en alusión a Agirrezabala, uno de los héroes en la tanda de penaltis junto con
Berenguer, el autor del penalti que valía el título.
Muniain, que salió en la prórroga y marcó uno de los penaltis, había rotulado previamente en el autobús del equipo el número 25 en el palmarés en el apartado de Copas, como había hecho en el 2021, también en
Sevilla, el número 3 en el de Supercopas. Tras un primer recibimiento por parte de trabajadores del aeropuerto, la expedición se trasladó en autobús hasta Lezama donde esperaban, bajo la lluvia, más de un centenar de aficionados.
Sucesivamente fueron saliendo de las instalaciones en sus coches particulares para regresar a sus domicilios. Entre ellos también se pudo ver al presidente, Jon Uriarte, y al técnico, Ernesto Valverde, que se bajaron de sus coches para firmar autógrafos y sacarse fotografías con los aficionados.
Marcelino era hasta el sábado el último entrenador que había conseguido ganar un título oficial con el Athletic, la Supercopa en 2021 en la propia Cartuja. “Zorionak txapeldunak! (¡felicidades, campeones!). Esos jugadores, ese equipo, esa afición merecían este título. Es un día feliz para mí por ver feliz a tanta gente a la que quiero de esa gran familia que es el Athletic. Me alegro de corazón por esta Copa tan deseada por todos”, apuntó el actual técnico del Villarreal. Este es el rival contra el que el Athletic retoma la competición liguera, el domingo en San Mamés. Habrá pasillo. Los leones descansan hasta el miércoles.
Ayer se veían rostros cansados, pero muy felices en Bilbao, tras una jornada memorable. "Un día para recordar. He dormido tres horas. La gente,
Lezama Más de un centenar de hinchas desafió a la lluvia y animó al equipo