Un gol del laboratorio de Bordalás noquea a Míchel
Cala finalizó de cabeza una nueva jugada de estrategia
EI Getafe gana a veces con lo que hacen sus jugadores el día del partido y otras muchas con lo que ensaya su entrenador entre semana.
El partido de ayer castigaba al espectador con un fútbol enredado, y en esos casos nada mejor que el balón parado para resolverlo. Bien sabe Bordalás de la importancia de manejar esas artes, pues su Getafe es el equipo que más goles lleva en jugadas de estrategia.
El mérito inicial fue de Molina, que en el minuto 73 peleó y peleó el balón hasta sacarle una falta innecesaria a Luis Hernández casi en la cal de la banda derecha. Ahí entró en escena el laboratorio de Bordalás, entrenador que tantas horas y horas le dedica a la estrategia durante la semana para luego sorprender en los partidos.
Botó la falta Fajr con un globo que sobrevoló a los habitantes del área, que eran casi todos los jugadores que estaban sobre el césped, Ángel, descolgado más allá del segundo palo, amortiguó el balón de primeras templando un centro a la cabeza de Cala, que supo aparecer sin marcaje a su alrededor. Así fue el único gol del partido. Eso fue lo mejor del encuentro.
El Getafe-Málaga empezó prometiendo lo que luego no cumplió, pues la ocasión de Molina en el minuto 3 acabaría siendo lo más peligroso de la primera parte. Molina dejó verdeando a Ignasi Miquel al borde del área, pero equivocó su disparo cuando se plantó solo delante de Roberto cruzando en exceso.
Una chilena en posición forzada de Chory Castro (5’) y un remate con efecto muy intencionado de Recio (7’) al que le costó coger la rosca, insinuaban un eléctrico partido, pero fue un engaño. Getafe y Málaga se enredaron el uno con el otro con un juego sin elaboración.
Un despiste de Cala (57’) dejó a Adrián en posición inmejorable para rematar de cabeza un envío de Recio, pero Martínez tuvo tiempo para despejar a córner. El Getafe poco decía, hasta que a Molina le dio por pelear aquel balón.
Molina Supo sacarle a Luis la innecesaria falta que acabó en gol