Yamaguchi, base de la natación de cara a Tokio
Cuatro federaciones tienen ya ventajosos acuerdos
Los taikos, tambores tradicionales japoneses, atronaron en la sede del CSD en Madrid. Anunciaron la cercanía de Tokio 2020, y sirvieron para celebrar el acuerdo de la Federación Española de Natación con Yamaguchi, ciudad que será su segunda casa hasta 2021, cuando se celebre en Fukuoka el Mundial. “Realizaremos 12 concentraciones de todas las especialidades, con todos los gastos pagados”, explicó Fernando Carpena, el presidente, respaldado por José Ramón Lete, secretario de Estado; Alejandro Blanco, presidente del COE, y Kazuki Ito, vicealcalde.
“Es una instalación digna de un campeonato del mundo, y lo mejor es que podremos disfrutar de ella en exclusiva cuando queramos. Una quincena antes de Tokio 2020 será nuestra base. En un evento así, en la otra punta del mundo, la adaptación a horarios, comidas o cultura es lo más importante”, apunta Albert Tubella, director deportivo.
“Es clave ir a los Juegos sabiendo lo que te vas a encontrar y adaptarte bien a los horarios. Hay una piscina de 50 metros con cámaras, aparatos de biomecánica, los nuevos poyetes de competición...”, expuso contenta Mireia Belmonte, campeona en Río 2016.
Un acuerdo que surgió de casualidad, cuando Yamaguchi, hermanada con Pamplona porque el jesuíta San Francisco Javier llegó allí en el siglo XVI a evangelizar, se puso en contacto con el consistorio navarro para saber si alguien quería ir allí a preparar los Juegos. Llegó a oídos de Carpena, y la ciudad nipona será la base de la RFEN para afinar de cara a Tokio.
En la sede del CSD hubo dos presidentes más de federaciones olímpicas que iniciaron contactos con la delegación japonesa. Preparar unos Juegos en Japón es caro. La de Balonmano ya ha conseguido aliarse con la prefectura de Nagasaki. La de Karate, con Fujinomiya, donde enviarán en 2019 a 25 personas y en 2020, a 15 sin arañar sus arcas. Y la de Tenis de Mesa, con Kosai.