Carapaz da a Ecuador su primera victoria en el Giro
Se estrenó en una grande con su ataque en Montevergine
Lo advirtió en As en la previa de Montevergine: “Me siento muy bien, quiero ganar una etapa de montaña y terminar lo más arriba posible en el Giro”. Y Richard Carapaz cumplió la primera parte de su declaración de intenciones. Exultante, empapado, se golpeó el pecho al cruzar la meta. Un ataque seco y certero a 1,5 kilómetros le sirvió para lograr su primer triunfo en una grande. También el primero de Ecuador en la ronda italiana y el 18º del Movistar en lo que va de 2018. “Una jornada para el recuerdo”, valoró él, maglia blanca de mejor joven (tiene 24 años) y octavo de la general. Llegaba en forma, de conquistar El Acebo y la Vuelta a Asturias: sus primeras victorias como profesional en Europa. “Pero en el Giro cumplo un sueño de niño”.
Entre los favoritos no se produjeron diferencias, salvo los cuatro segundos con los que bonificó Thibaut Pinot. Simon Yates sigue líder y Chris Froome continúa gafado. Se cayó en Jerusalén, le sacaron tiempo en Caltagirone y volvió a irse al suelo al tomar una resbaladiza curva durante la subida final. Poels, De la Cruz, Henao y Elissonde le reintegraron en el grupo. Después no habló con los periodistas, notablemente fatigado y enfadado.
Lluvia. Tampoco ayudó el clima. El pelotón pasó del sol de Praia a Mare, ciudad calabresa bañada por el Tirreno, a la lluvia torrencial de la Campania, en la aproximación y en la exigente ascensión al Santuario de Montevergine. “Un día con contrastes y muy duro”, resumió Yates. E histórico para Carapaz.
El Gran Sasso presentará hoy nuevas oportunidades: 26,5 kilómetros al 3,9% de porcentaje medio, con rampas que alcanzan el 13%. Un señor puerto, por encima de los 2.000 metros de altura, precedido de Roccaraso y Calascio… y con 225 km en las piernas. López Carril, gallego de nacimiento y asturiano de adopción, inauguró la cumbre en 1971. En 1989 venció Carlsen y en 1999, Pantani. Como a Froome, a Tom Dumoulin, defensor del título, no se le nota a tope. Los medios holandeses especulan con que pretende afrontar otro doblete Giro-Tour y estar al máximo en la tercera semana. Él no despeja las dudas. “No me veo fino”, confirmó ayer. Yates y Chaves desean aprovechar cada ocasión, como Pinot y Pozzovivo. Y Carapaz: “No me descarto de nada”.