Mario Mola es un ciclón: tercer Mundial seguido
Fue segundo en el triatlón de Gold Coast y conquistó la general
Con sangre fría y dominio de la tensión, Mario Mola remató su tercer título mundial de triatlón en la final de Gold Coast. En la ciudad australiana, este mallorquín de 28 años acabó segundo tras el francés Vincent Luis. A Mario le sobró: necesitaba quedar en el top-14 gracias a las cuatro victorias alcanzadas en 2018. Con esta tercera corona iguala con el australiano Peter Robertson. Ya sólo dos mitos están por delante: el británico Lessing, con cuatro, y Gómez Noya, con cinco. El aprendiz cada vez está más cerca del maestro y manda en los tres últimos años: 2016, 2017 y 2018. Sólo el gallego había hecho el encadenado antes.
La carrera decisiva se presentaba caliente y con estrés. Con el ingrediente extra de los dos Brownlee inscritos, sin opciones para la general, pero con ganas de guerra. El australiano Birtwhistle y el francés Luis, dos compañeros de entrenamiento, eran los enemigos reales de Mola: “Se trataba de ser inteligente, había muchas variables y no debía cometer errores”.
Mario salió de los 1,5 km de la natación el 31º, a 40 segundos. Las aguas del Pacífico se atragantaban, pero esquivó la montonera acuática que dejó fuera de juego al campeón olímpico, Alistair Brownlee, que se saltó una boya. Mola iba a por la bici detrás... y vivo. En ciclismo, pocas aventuras durante 40 kilómetros. 24 segundos sacaron los aventureros en los primeros compases. En el ecuador se fusionó el pelotón. A la T2 llegó solo el noruego Blummenfelt y, después, el grupo VIP, con Mola bien arropado.
A pie hubo un corte rápido y a los cinco kilómetros se había marchado con Luis (primer parcial en 14:50, a 2:58). Birtwhistle naufragaba, título asegurado para el español que se cuidó de no desfallecer y dejó galopar a la victoria parcial a su amigo Luis. “No me quería volver demasiado loco para evitar desfallecimientos, porque hasta que no cruzas la meta no vences”, dijo. Y cruzó segundo para sumar su tercer título consecutivo.
Para fraguar este Mundial, Mario ganó las pruebas de Yokohama, Hamburgo, Edmonton y Montreal. Hizo dos segundos (Leeds y Abu Dhabi), y su peor puesto fue un cuarto en Bermuda, pocos días después del accidente de tráfico de Carol Routier, su pareja, que también es triatleta. “Ella ha sido un factor más para querer hacerlo bien. No estaba preparado para lo que sucedió, pero ella fue fuerte, llena de energía”, relató Mola, que estuvo acompañado de Routier en Gold Coast.
Desde 2008 se han disputado once Mundiales, cinco conquistó Gómez Noya y tres Mola, el nuevo jefe de la distancia olímpica, gracias a sus piernas y a su cabeza prodigiosa. “Lo que hizo Noya está lejos, él me inspira”. Un chico inteligente.
El balear “Se trataba de ser inteligente, no debía cometer errores”