Del Madrid de Guti y Raúl al Mundial de Footgolf
Jaime Romero da lustre a la Selección que debutará en Marruecos
Marrakech acoge desde mañana a 450 jugadores(as) y 36 selecciones que compiten en una especialidad, a caballo entre el golf y el fútbol, que está de moda. Con España jugará otro descubrimiento de Del Bosque, un manchego al que un problema cardíaco apartó de la élite.
Después de Antonio Díaz-Miguel, Vicente Paniagua, Antonio Rivas y otros deportistas de primera línea, Jaime Romero Felipe (1977) fue en Alcázar de San Juan (Ciudad Real) algo más que un ídolo. El hecho de que el mismísimo Del Bosque viajara varias veces hasta La Mancha para llevárselo a la cantera del Madrid en 1993 le dio más vuelo a un delantero que regateaba como Onésimo y que esprintaba como Agüero. Tras una excepcional trayectoria en las categorías inferiores de la Selección, junto a Puyol, y en la Ciudad Deportiva con Guti y Raúl durante cuatro años, el corazón le dijo basta. Un problema cardíaco (Wolf Parkinson White) le alejó de la élite, aunque no de los grandes escenarios. Desde mañana representará a España junto a 18 compañeros más en el Mundial de Footgolf de Marruecos.
Este deporte de moda se inició en Holanda en 2009 y fue patentado en el Mediterráneo por Asensi (exinternacional de Barça y Elche). Es mitad fútbol mitad golf, se juega a 9 o 18 hoyos en los mismos campos y tiene básicamente el mismo reglamento: se trata de introducir el balón (talla 5), de 22,29 centímetros de diámetro, en un agujero de 52 con el menor número de golpes posibles. Su llegada a España (ya lo practican 500 jugadores) fue más tardía que en el extranjero. Mientras Ayala, ex del Valencia y favorito en este Mundial con Argentina, y Makaay, leyenda holandesa del Depor, ya son referentes, Jaime supo de este hobbie por casualidad tras haber ido asimilando que su sueño de convertirse en profesional se evaporaba. Albacete y Toledo le tentaron al salir del Madrid, pero se negaron a firmar su reconocimiento médico si no se operaba. “No me expuse a la intervención, ya que sólo era necesaria para jugar y no para vivir”.
Así, tras agotar sus últimos goles en Tercera, formarse como profesor de Educación Física e Inglés (da clase en el Colegio Amor de Dios de Madridejos) y ver cómo al menos su hermano José Luis sí debutaba con el Alba, un maestro de golf le alertó de la nueva disciplina del Footgolf. Cansado de ser pichichi en las ligas locales y de barrer al pádel, decidió desempolvar su gran toque. “Su golpe de interior es buenísimo”, reconoce Guti a As, aunque Jaime confía más “en el de puntera”.
Poco a poco el ariete comenzó a investigar dónde entrenarse a Footgolf. En Alcázar le tienen prohibido patear si no es con hierros, así que comenzó a entrenar a 170 kilómetros de casa: en Palomarejos Golf (Talavera) y en el Señorío de Illescas (Toledo). Sólo alguna empresa le echó una mano. Los gastos corren siempre de su cuenta. “Es curioso. Ir a la última prueba clasificatoria en Canarias me costó 1.200 euros y en este Mundial, en el que compiten 450 jugadores y jugadoras y 36 selecciones, España es la única sin patrocinador. Japón tiene a Bodegas Iniesta...”.
Su inversión pronto quedó rentabilizada. Jaime fue campeón de Castilla-La Mancha en 2016, 2017 y 2018, campeón de España en 2015, subcampeón en 2017 y acudió al Europeo de Francia. “Mi objetivo ahora es disfrutar”, reconoce, obviando que este año brilló en Calatayud, que ganó la tercera etapa del Campeonato de España y que puede presumir en su tarjeta de un -15 en dos días. “No hay presión. Es nuestra primera gran cita y hay selecciones que nos llevan años de ventaja. Sobra ilusión. Intentaremos meternos en el cuadro final. Ahora tengo 41 años, pero si llego en forma a los 45 (pesa 73 kilos, como cuando brillaba en el Madrid) y paso a sénior, con menos competencia, podría pensar en algo más”. El fútbol le debe una. Por eso, Del Bosque y Toni Grande (le entrenó) esperarán impacientes a que les escriba desde Marruecos con los resultados.
Precariedad “No tenemos patrocinador, y el de Japón es Bodegas Iniesta...”
Los objetivos “Ésta es nuestra primera gran cita: intentaremos pasar al cuadro final”