Cómo hacer una compra segura
Los supermercados son lugares críticos y han tomado medidas: desinfección, límite de aforo, guantes obligatorios...
La asistencia a los supermercados para comprar comida es una de las excepciones del estado de alarma que decretó hace tres semanas el confinamiento total. Por ello, estos centros han puesto en marcha una serie de medidas de seguridad para proteger la salud y la seguridad de sus clientes frente al coronavirus. Entre estas se encuentran el control del aforo, la obligación de usar guantes para manipular los alimentos, el pago con tarjeta para evitar el contacto físico y la obligación de que los clientes acudan individualmente al supermercado a hacer sus compras. Estas recomendaciones son generales, aunque cada cadena ha incluido medidas adicionales para sus centros.
Los supermercados son lugares críticos, porque al ser uno de los pocos espacios a los que se puede seguir yendo se pueden producir contagios en él. Por eso, estas medidas son importantes. La primera cadena de supermercados en tomarlas fue Mercadona, pero pronto se le sumaron las demás. Una de las principales restricciones es la de respetar la distancia mínima de un metro entre los clientes. Si se excede el límite de personas, no se podrá entrar hasta que el supermercado no se vaya vaciando. Algunos también limitan la compra de determinados productos excesivamente solicitados.
Solamente las personas asintomáticas pueden ir a la compra, y se recomienda que esta se haga a lo largo del día, y no solamente a primera hora, para intentar evitar aglomeraciones y colas. El pago preferiblemente debe hacerse con tarjeta para impedir el contacto físico. Los horarios también han cambiado, y todos los supermercados se mantienen abiertos aproximadamente 11 horas. Asimismo, se han reforzado los procesos de desinfección y limpieza diarios en los supermercados. El suministro está garantizado, por lo que se desaconseja almacenar comida.
Recientemente un estudio científico publicado por el New England Journal of Medicine apuntaba a que el COVID-19 podía permanecer activo hasta tres días en superficies como el plástico o el cartón, que están presentes en los supermercados. Los expertos insisten en que contagiarse con estos objetos es improbable, ya que la carga vírica que permanece en ellos es mínima, pero se recomienda extremar las precauciones y lavarse las manos al llegar a casa para eliminar rastros, al igual que si se maneja dinero. Una vez en casa se recomienda lavar los alimentos antes de la ingesta.
Los compradores deben ser personas asintomáticas y se recomienda ir a los supermercados a lo largo del día para evitar aglomeraciones
Es recomendable el pago con tarjeta para impedir al máximo el contacto físico, si se usara dinero habría que lavarse las manos después