Las clases presenciales se tornan una utopía
Manuel Castells, ministro de Universidades, sugiere a los centros que terminen el curso a distancia y pide flexibilidad máxima
No es oportuno reanudar las clases presenciales en las universidades debido a la emergencia por el coronavirus. Ese fue el mensaje que comunicó ayer el ministro de Universidades, Manuel Castells, a las comunidades autónomas, tras la reunión con los responsables educativos de cada región en la que se discutió cuál debe ser el desenlace del actual curso. Las universidades tienen autonomía, pero se cree que todas asumirán las indicaciones del Gobierno.
En un documento entregado por el Ministerio se indica que la evolución en España de la pandemia condiciona los plazos en los que sea posible volver a la enseñanza presencial. Las universidades están organizando modalidades de enseñanza no presencial tanto de las actividades del curso como de su evaluación. “Cada universidad, en función de sus posibilidades, determinará la vigencia de dichas modalidades, así como las fechas de su aplicación según la evolución de la pandemia”, agrega el documento.
Castells propuso tener flexibilidad máxima a la hora de evaluar a los alumnos. La manera de hacerlo a distancia será determinada en cada centro educativo y en cada asignatura. A su vez, habrá unos criterios claros que deberán publicar los profesores, los departamentos o la facultades para que los alumnos estén al tanto de los nuevos métodos de evaluación.
Según fuentes de Universidades, el 15 de abril habrá una nueva reunión con los representantes de las comunidades para garantizar “de manera coordinada” el cierre del curso. El Ministerio dijo que la meta es garantizar que “no se producirá ninguna pérdida de curso escolar en ninguna de las universidades”.