La clase alta cortocircuita
Por nombres propios e historia reciente, sigue siendo la gran favorita de Europa para ganar el Mundial, pero la imagen que ha dado en estas cuatro jornadas ha sido desastrosa: dos empates y dos derrotas que le dejan fuera de la Final Four de la Nations League. Deschamps siembra dudas.
Dos derrotas ante Hungría, la última, histórica (0-4), y dos empates vuelven a poner a Southgate bajo sospecha. El seleccionador inglés siempre ha sido cuestionado por la afición inglesa, pero los resultados en el Mundial (semifinalista) y la Eurocopa (finalista) le han dado un margen que parece estar a punto de acabarse.
Cierto que la inminencia de las vacaciones tampoco invita a hacer demasiados alardes, pero la nobleza europea, la futbolística, ha cortocircuitado las últimas semanas. De forma sangrante en algunos casos. Italia llegaba ya caliente. Su segunda ausencia consecutiva de un Mundial urgía a invertir la tendencia. Pero allí la histeria se ha extendido. Tan pronto se entregan de forma desmedida a la aparición de un descubrimiento de 18 años de edad como Gnonto como horas después se tambalean los cimientos de la Nazionale por el baile de Alemania. Un bucle peligrosísimo y carente de los senatori del pasado para tirar del carro.
Mientras, Inglaterra clama contra Southgate porque no libera todo su potencial de ataque. En la Premier se han acostumbrado a disfrutar de tormentas de fútbol lideradas por los técnicos foráneos y ven que su selección es un sucedáneo estrangulado por su entrenador. Poco más o menos en Francia, donde a Deschamps no le vale la excusa de las rotaciones porque su fondo de armario es también de etiqueta.
Lo tiene también la selección de Portugal, pero Fernando Santos no ha pulsado bien las teclas. Han mantenido el tipo. Nada más. Empataron con España, que es la fiabilidad. Algo que se ha llegado a infravalorar. No lo hagan. Entre toda esa mediocridad, sobresalen los Países Bajos de un siempre frontal Van Gaal. No se anduvo por las ramas en el caso Wijnaldum y de no ser por el penalti que erró Memphis hubiera hecho pleno. El Mundial de Qatar todavía queda un poco lejos y muchos se habrán tomado la Nations League como un simple torneo veraniego, pero al final cuesta mucho invertir una mala inercia.