De víctima de la Yihad a criticar el veto de Trump
Kerr, contra el decreto presidencial
Steve kerr nació en Beirut, creció entre El Cairo y París y vivió, en 1984 y como universitario en Arizona, el asesinato de su padre, un académico especializado en Oriente Medio que por entonces presidía la Universidad Americana en Beirut, a manos de la Yihad. Después fue cinco veces campeón de la NBA, a las órdenes de Phil Jackson y Gregg Popovich, y desde 2014 es el entrenador de uno de los mejores equipos de la historia de la NBA: Golden State Warriors.
Con ese bagaje y un indudable espíritu californiano (San
Diego fue lo más parecido que tuvo a un hogar después de su infancia), Kerr es desde luego una voz perfectamente autorizada para opinar sobre el polémico decreto migratorio aprobado por Donald Trump y que ha generado una ola de protestas en muchas ciudades del país.
La prohibición de entrada a refugiados e inmigrantes procedentes de siete países (Siria, Irán, Sudán, Libia, Somalia, Yemen e Irak) es un camino equivocado para muchos estadounidenses, entre ellos el propio Kerr: “Como alguien que perdió a su padre por culpa del terrorismo creo que es un gran error combatir ese terror con prohibiciones que atacan los principios fundamentales de nuestro país y que generan más miedo. Se siembra más terror y más ira, es algo que rechazo completamente. Me parece horrible y me preocupan los efectos que esto puede tener para la seguridad mundial. Este no es el camino”.