Juanlu y Poyatos, talento perico en la cantera blanca
Vitales en Sant Adrià, ahora trabajan en Valdebebas
Las instalaciones de Valdebebas, donde la cantera del Real Madrid intenta formar a los futbolistas del futuro, es una de las más espectaculares del mundo, con más de un millón de metros cuadrados de campos de entrenamiento, habitaciones para los jugadores y todos los servicios que pueden necesitar cualquier joven. En ella, dos extécnicos de la cantera blanquiazul están ahora inmersos en el crecimiento de este proyecto blanco.
De la mano de Víctor Fernández, jefe de La Fábrica, Juanlu Martínez (1998-2011), quien fuera responsable del departamento metodológico del fútbol base del Espanyol y miembro del cuerpo técnico del primer equipo desde la época de Ernesto Valverde (2006), es ahora el encargado de la metodología en el Real Madrid. El entrenador, que tiene una filosofía muy particular que aproxima la enseñanza del fútbol a la neurociencia, está desarrollando un departamento de I+D para convertir la cantera blanca en una referencia aún más grande.
Juanlu, creador de Smartfootball, intenta con su metodología que el jugador desarrolle principalmente su cerebro. Este valenciano (1970), que llegó al Espanyol de la mano de José Manuel Casanova, implantó su manera de entrenar en el Espanyol hasta que finalmente Mauricio Pochettino y Ramon Planes decidieron que continuara después del curso 2009-10.
El otro perico que está en Valdebebas es Dani Poyatos, extécnico del Juvenil A que ganó la Liga y la Copa del Rey en 2012 y quedó subcampeón de la Copa de Campeones, con jugadores que luego dieron el salto al primer equipo como Rubén Duarte, Pau López y Joan Jordán. Poyatos, después de estar unos años en Bahrein
Juanlu es el coordinador metodológico y Poyatos entrena el líder Juvenil B
y en la selección catalana Sub18, es ahora el entrenador del Juvenil B del Real Madrid, que va líder de su grupo con siete puntos de ventaja sobre el Atlético de Madrid. Los madridistas no han perdido un solo partido en lo que va de campeonato. Por su pasado, ambos tendrán mañana el corazón dividido.