Los clubes ya trabajaban para evitar casos como el de Alaró
Códigos de conductas, charlas, talleres de formación, vigilancia a los padres...
Hace años que los 20 clubes de Primera tienen implantados códigos de conducta para los chavales de su cantera y para sus padres, llegando incluso a la exclusión de un niño por el comportamiento irreverente del progenitor. La pelea de padres en la grada en el Alaró-Collerense hizo saltar la alarma social, pero el fútbol profesional está concienciado.
La imagen vergonzante de padres pegándose en la grada mientras sus hijos jugaban apaciblemente un partido de fútbol en Alaró (Mallorca) se convirtió en noticia social-deportiva de primera línea.
De inmediato surgió la pregunta: ¿Se trata de un suceso aislado o es incidente común? y lo más importante, ¿se hace algo para evitarlo? AS ha contactado con los 20 clubes de Primera División y absolutamente todos están sensibilizados con este tipo de episodios violentos en el fútbol base, y no hay uno solo que desde hace años no tenga medidas adoptadas: normas educativas de obligado cumplimiento, protocolos de actuación, talleres de formación, vigilancia educativa, sanciones y prohibiciones taxativas a los padres.
El fútbol no profesional también se moviliza en la obligación de padres e hijos, y en algunas comunidades los árbitros de categorías inferiores deben incluir en su acta una puntuación del 1 al 10 sobre el comportamiento de los espectadores. Si la nota es negativa se le restan puntos al equipo.