Primera crisis después de Monchi y sin líderes
La hora de Arias. Pareja y Carriço seguirán fuera
Una intensa lluvia recibió al Sevilla en el amanecer del miércoles, tras un largo y silencioso viaje de madrugada en el que la tónica fueron las caras de preocupación de futbolistas, directivos y, sobre todo, del técnico Eduardo Berizzo y el director deportivo Óscar Arias. La derrota en San Mamés y la goleada recibida en Moscú provocan que Arias se enfrente a su primera crisis como cabeza visible del proyecto nervionense, el primero sin Monchi en este siglo y 11 años después de que comenzara la mejor época de títulos y buenas clasificaciones ligueras.
Lo tendrá difícil Arias. Monchi era mucho más que un rey Midas de los fichajes. Además, tranquilizaba a directivos y jugadores, ofrecía el discurso ante los medios y hasta ayudaba a entrenadores, sobre todo los nuevos como Berizzo, a matizar tácticas o estrategias. Lo hizo con Emery, con Sampaoli y parece necesitarlo el nuevo inquilino del banquillo, cuyo equipo no comienza a carburar por más que, hasta esta semana, los resultados le dieran algo la razón. Falta quizá el carácter diplomático de Monchi y el coraje de la veteranía sobre el campo, donde nadie dio una voz el martes cuando el Spartak comenzó a golear. Escudero y Mercado son los sucesores de Vitolo e Iborra, pero no han demostrado todavía la autoridad para recoger ese testigo. Ahora les llega a todos la hora de la verdad.