“En la Copa de España de galgos reunimos a 40.000 aficionados”
Luis Ángel Vegas destaca el interés de su deporte en el mundo rural
Había sido elegido presidente de la Federación de Castilla y León pero en el último momento Luis Ángel Vegas (Madrigal de las Altas Torres, Ávila, 39 años) tuvo que dar un paso al frente y presentarse a dirigir la Federación Española. “No estaba en mis planes, porque éramos un grupo y teníamos una persona para ese puesto, pero por cuestiones privadas renunció, y me tocó asumir la condición de candidato sin ni siquiera asumir el puesto en Castilla y León”, asegura el máximo responsable de la Federación Española de galgos, que está en su segundo mandato, y en este tiempo ha logrado entrar como vocal en el Comité Ejecutivo del Comité Olímpico Español, “un hito para el mundo de los galgos, que nunca había llegado a una representación de ese nivel”.
Vegas, militar de profesión en excedencia, que desde hace unos meses reside en Benavente (Zamora), y se dedica a los galgos “por entero, aunque no de una manera profesional”, es un apasionado defensor de un deporte al que llegó por casualidad: “Esta es una disciplina netamente rural, y en mi casa no había tradición ni mucho interés por los galgos, pero un día vi una competición, y me pasó como a mucha gente, que me quedé impactado, y me metí en este mundo, en el que ahora soy criador con dos amigos más. Como nos llamamos Luis, el apellido registrado para nuestros perros es claro, Los Luises”.
Y sí, se considera un deportista, “porque los criadores tienen que preparar al galgo, sacarle todos los días al campo cuando se puede, correr con él, acompañarle en bicicleta, trabajar de manera específica dos horas diarias, más luego cuidarle la alimentación, el estado físico y muscular para que rinda. Todos los galgos que van a los campeonatos de España tienen su veterinario y su fisioterapeuta específico. Y como todos los deportistas también pasan sus controles de dopaje, con fuertes sanciones para los propietarios de los perros que dan positivo, que por fortuna son casos aislados”.
Bajo dos ministerios. La cuestión queda en definir si los galgos no serían una variante más de la caza, a lo que Luis Ángel Vegas responde que no, que tienen relación, pero son diferentes. “La temporada galguera coincide con la época de caza, porque no se pueden soltar a los perros cuando hay veda. Es decir, competimos de octubre a enero, y ahí se acaba nuestro año, salvo en algunos casos excepcionales que para disputar el Campeonato de España nos conceden un permiso de un par de días más, por ejemplo”, comenta el presidente, que cuenta que su deporte “depende de dos ministerios, de Educación (CSD) y de Agricultura, y en este caso son diecisiete legislaciones diferentes”, y pone el ejemplo de Castilla y León, donde está “prohibido disparar a las liebres”.
¿Pero a quién le interesan los galgos? Es una pregunta que sorprende a Luis Ángel Vegas, que si bien sabe que su deporte no tiene mucha trascendencia urbana, sí goza de mucho predicamento en los ambientes rurales de Andalucía, Extremadura, Castilla La Mancha, Madrid y Castilla y León. “Hay pueblos enteros que siguen a un galgo, que no necesariamente tiene que ser tuyo, sino del que te has enamorado. Y eso se ve en las finales de los Campeonatos de España, porque nosotros llegamos a reunir en un día a 40.000 personas en la loma cerca del corredero (campo en que corren los galgos). Es decir, buscamos nuestros Santiago Bernabéu, Wanda o Camp Nou particulares, donde tengamos buenas camadas de liebres, que nosotros ya conocemos, un espacio de unas 600 hectáreas para que se pueda disputar la prueba, y que haya un alto donde se coloquen los aficionados, porque no hay gradas ni nada por el estilo, pero está todo muy organizado. La afición va donde le corresponde, y con poca gente somos capaces de sacar toda la organización”, cuenta con orgullo este militar ahora en excedencia.
Casi con la misma euforia es capaz de contar que su Federación es autosuficiente, que recibe 20.000 euros de subvención del CSD, “que es menos de lo que cuesta la persona que tiene que trabajar en la documentación que se debe remitir para su auditoría”. Pero mueve más de medio millón de euros en el presupuesto anual, “casi todo en recursos propios que llegan de las licencias”.
“Algo que nos gusta dejar claro: los galgueros respetamos el bienestar del animal,
Premios “El único negocio de ganar es el prestigio social que ofrece”
Vencedor “No importa el atrapar la liebre, sino hacer una buena carrera”