La Volta se pone a 100
La histórica edición 100 comienza hoy con Valverde, Froome, Nairo, Thomas, Carapaz...
Después de que la pandemia pospusiera la carrera en 2020, hoy comienza la edición número 100 de la Volta a Catalunya. Se trata de la cita por etapas más antigua de España y la cuarta de todo el mundo, sólo por detrás del Tour de Francia (1903), la Vuelta a Bélgica (1908) y el Giro de Italia (1909). Blindados por los test PCR y las burbujas del protocolo sanitario, que dejará las salidas y metas desiertas de público, muchos de los grandes nombres del pelotón partirán de Calella esta mañana. Faltarán Pogacar, Roglic y Landa, que se reservan para el País Vasco, y el último vencedor, Superman López, que aplazó su calendario tras infectarse por COVID-19, pero competirán por el título el tridente del Movistar, Valverde, Mas y Soler, Froome, Dan Martin, Nairo, Hindley, Chaves, Simon y Adam Yates, Porte, Carapaz, Thomas, Kruijswijk, Kelderman, Almeida, Carthy, De la Cruz, Poels… Un cartel de quilates para un evento histórico.
La organización planteará un trazado con distintas alternativas, con media montaña, opciones para el esprint, crono y dos metas en alto. La contrarreloj regresa a la Volta después de pasar prácticamente a la omisión desde 1998 (únicamente se disputaron dos CRI desde entonces, en 2007 y 2010), con 18,5 km por los alrededores de Banyoles. Las llegadas de montaña tendrán lugar en Vallter 2000 y Port Ainé, mientras que la ronda concluirá
Estrellas Menos Landa, Roglic y Pogacar, estarán casi todas las figuras
con seis ascensiones hasta el Castillo de Montjuïc, con pendientes del 18%, la misma subida que se completaba en la extinta Escalada a Montjuïc.
El Kern Pharma y el Euskaltel participarán como invitados, se cayeron Caja Rural y Burgos. Sin embargo, al único equipo español del World Tour, el Movistar, le hace falta brillar tanto o más que a ellos. De las 19 escuadras de Primera, sólo los telefónicos, el Astana y el Intermarché no suman ningún triunfo en 2021. Chris Froome, concentrado en Canarias para preparar la Volta, también necesita codearse de nuevo con los mejores en un lento proceso de rehabilitación. La 100ª Volta se presenta como un escenario más que propicio. Algo que celebrar en tiempos del coronavirus.
Recorrido La Volta tendrá una crono, dos metas en alto y media montaña
Las Guerreras estarán en Tokio. Misión cumplida. Será su quinta presencia en unos Juegos, la tercera consecutiva. La clasificación olímpica siempre genera alegría, pero en este caso tiene un sabor especial para un equipo en continua renovación durante los últimos años. Son las herederas de aquella Selección que logró el bronce en Londres 2012, un histórico podio difícil de reeditar, pero en ningún caso imposible. Las Guerreras son las actuales subcampeonas del mundo, conviene no olvidarlo. Esa brillante actuación mundialista fue mucho más que una medalla, porque también permitió a España integrar un grupo más sencillo en el Preolímpico. La plata vino acompañada de medio pasaporte para Japón, pero hacía falta rematar, sin caer en las inseguridades que pudieron provocar su noveno puesto el pasado diciembre en el Europeo. Las Guerreras hicieron honor a su apodo en el primer choque ante Suecia para empatar in extremis. Y ayer redondearon la jugada con una paliza a Argentina que también trajo el premio extra de evitar a los Países Bajos en el bombo olímpico.
El billete de las Guerreras eleva a once el número de Selecciones en Tokio 2020, con doblete masculino y femenino para cinco deportes: baloncesto, balonmano, hockey, waterpolo y gimnasia. A los que hay que añadir el fútbol masculino. España es la mayor potencia mundial por equipos, junto a Estados Unidos y Australia. Y los datos vuelven a ubicarla arriba. Nueve de esas Selecciones, todas menos las de gimnasia, se han subido a algún podio internacional en este período olímpico, lo que confirma sus candidaturas a las medallas. El balonmano femenino puso la sonrisa del fin de semana, pero también hubo malas noticias en sus colegas masculinos: las graves lesiones de los hispanos Dani Dujsehbaev y Aitor Ariño. El camino es largo, el camino es duro, muy duro… Pero se hace camino.