Cristiano y mucho más
Portugal debuta ante 60.000 hinchas en Budapest
Hace mucho que los futbolistas no juegan ante 60.000 espectadores. Habrá que tenerlo en cuenta.
Cristiano persigue el récord goleador con selecciones de Ali Daei. Tendrá hambre para marcar goles hoy.
Portugal sabe que tiene que ganar ante la Cenicienta del grupo. Si no gana, estará obligado ante Alemania y Francia después.
El buen portero del Leipzig tendrá trabajo hoy. Da seguridad y debe transmitirla a la defensa.
Una temporada rara en el Liverpool, empezó bien en el Liverpool y una lesión le frenó. Llega a la Euro con ganas de redimirse.
Una baja importantísima en los húngaros, su estrella Szoboszlai. Tampoco estará Kalmar, lesionado.
Portugal no tendrá a Cancelo, que dio positivo en COVID y está fuera del torneo. Dalot entró por él.
La Portugal de Cristiano se estrena en la Eurocopa ante Hungría y en Budapest. Quizá habría que ir quitando el cartel de equipo dependiente de una estrella para los lusos. Portugal es mucho más que el delantero de la Juve y es mucho más que la selección que conquistó el título en 2016. El héroe de aquella gesta en la final de París, Éder, verá el estreno de hoy por televisión.
Y como él otros muchos que han tenido que apartarse ante el crecimiento de una nueva generación joven que aspira a dar continuidad a lo hecho en la anterior Eurocopa. Es tal el potencial de los portugueses que la baja de última hora de João Cancelo no altera demasiado su estructura. Entró por él Diogo Dalot, cedido por el United en el Milan e internacional Sub-21.
Todo lo demás se mantiene con una armonía propia de los equipos de Fernando Santos, ordenados en defensa y letales arriba. Budapest, mientras, asoma como un reducto ilusionado en lo que parece un lugar preCOVID. Aquí se jugaron varios partidos de rondas avanzadas de Champions cuando todo pendía de un hilo y hoy habrá más de 60.000 hinchas en las gradas, al no poner límites de aforo el gobierno que preside Viktor Orban.
Sin lateral La baja de Cancelo por COVID ha alterado a Fernando Santos
Bajas. Eso sí, a nivel deportivo la selección llega lastrada por la lesión de Szoboszlai y Kalmar, sus dos jugadores más creativos. Un viejo rockero, el exmadridista Szalai, será la mayor amenaza, aunque físicamente ya no es el que era. Portugal arranca y no quiere parar hasta el título. Desde hoy lo defiende con Cristiano y mucho más.