Se busca (otra vez) a Bale
Gales necesita la mejor versión de su estrella ante Turquía
A sus 35 años, vive su momento más dulce. El delantero turco ha hecho historia con el Lille y quiere hacerlo también con la selección.
No entraba en las quinielas para ser titular en el primer partido y acabó haciendo el gol del empate ante Suiza de cabeza.
Demiral arrastra algunas molestias y existe la posibilidad de que su puesto lo ocupe Kabak.
El seleccionador Page no informó ayer de ninguna baja de última hora en Gales.
De tanto esperar a Ulises en la Odisea, su esposa Penélope demostró ser tan paciente que tres mil años después Serrat la imaginó en una estación de tren aguardando el regreso de su marido entre lágrimas. Pues al pensar en Bale, uno se siente a veces como Penélope. Campeón de mil guerras en el Madrid y héroe en particular de hazañas históricas, queda la sensación de que un día se le vio partir para volver convertido en Cristiano y nunca regresó. De vez en cuando llegan noticias de que ha marcado algún gol en el Tottenham o un hoyo en uno en un campo de golf, pero poco a poco se ha ido perdiendo la esperanza de ver su mejor versión, salvo en Gales, donde creen en Bale más que en ningún sitio.
Y es que Gales necesita al mejor Bale si quiere aspirar a hacer un buen papel en la Eurocopa. Ante
Suiza, estuvo desaparecido y a su equipo, aunque al final rascó un empate, le costó mucho crear peligro al conjunto helvético. El punto fue un premio enorme y si las cosas no mejoran, es difícil pensar que Gales pueda sacar algo positivo esta tarde ante Turquía.
Los turcos se llevaron un varapalo en el partido inaugural ante Italia (3-0), pero son equipo aguerrido y pasional, casi lo opuesto a Gales, donde prima el orden. El veterano Yilmaz está en estado de gracia tras haber liderado al Lille a ganar la Ligue 1 y está secundado por gente que triunfa en las grandes ligas como Çalhanoglu (Milan), Söyüncü (Leicester) y Demiral (Juventus). La derrota los dejaría prácticamente eliminados del torneo, lo que los hace peligrosos. Eso sí, confían en no ver a Bale en el horizonte.
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