Reconquista azulgrana
El Barça arrasa al Madrid y levanta su Liga número 19 siete años después de la última ● Mirotic, un gran MVP
La cosa no empezó bien allá por septiembre en el estreno de la etapa Jasikevicius, de manera algo abrupta por el calendario que no permite rodajes y con derrota en la Supercopa ante el Madrid de Campazzo; pero nueve meses después da carpetazo al curso con un sobresaliente. Atrás queda, hace nada, una dura derrota en la final de la Euroliga; una pasada, sin embargo, llegar hasta ahí. Ahora todas las miradas apuntan a esta victoria por la vía rapidísima frente al Madrid, una exhibición con Mirotic de MVP (92-73 y 2-0). Y apuntan a un doblete Liga-Copa que hacía diez años que no lograba. Casi, casi tanto como el título de Liga, que le era esquivo desde 2014. La mayor sequía culé en 40 años.
Así que esta Liga Endesa, la número 19 del Barcelona, ha cogido a la sección con el estómago más vacío de lo que acostumbraba y la saboreará más. La guinda al inicio del proyecto
Jasikevicius, que comenzó con una muy buena labor de Nacho Rodríguez en los despachos y ahora lo celebra Navarro. Y lo celebra Pau Gasol 20 años después de aquel 3-0 al Madrid ante una hinchada blanca rendida a una nueva estrella, que el pasado domingo le tributó un homenaje por su asombrosa trayectoria. Y a la altura, claro, ha estado la afición azulgrana tras un éxito que quizá sea la despedida a su carrera de clubes, solo a la espera de un último baile con la Selección en los Juegos.
La final, en realidad, la dinamitó Higgins en el tercer cuarto del primer asalto con aquellos 14 puntos sin fallo. Lo que vimos ayer en el Palau fue una continuación con voces de coro, en la que si alguna sobresalía era la de Mirotic, otra vez doblándole el brazo a Garuba (27 tantos y 35 de valoración). La demostración soñada frente al club que le formó. Arropándole, Calathes. Y Davies. Y luego Gasol batiendo a Tavares. Y Kuric, Abrines… No habían pasado ni cinco minutos (16-5) cuando Laso pedía un tiempo muerto a la desesperada. “¿Hemos venido a este show…?”, preguntaba a voz en grito a sus jugadores.
La defensa asfixiaba a los merengues, que habían arrancado con balones a Tavares y sin su habitual intensidad competitiva como grupo en estas cotas tras una temporada durísima, repleta de contratiempos. Atrapados en la telaraña local y sin rebote, recurrieron atrás a una zona que solo desactivó alguna jugada puntual. “Ni ritmo, ni dureza, ni acierto”, resumía Abalde al descanso.
Una dinámica que no se aceleró en la segunda parte, simplemente se mantuvo. Con un +22 guiado por Mirotic (66-44), Alocén, Tyus y Garuba montaron un conato de rebelión (9-0) que desactivaron Calathes, Gasol y Kuric.
El último cuarto fue un largo pasillo al campeón. De la reconquista azulgrana a la reconstrucción blanca, la que le toca este verano sí o sí tras la primera campaña en la era Laso sin un trofeo de los grandes.
En blanco La primera temporada de la era Laso sin un trofeo de los grandes