Griezmann vuelve al Atleti con números del Barça
El francés, lejos del redebut soñado, estuvo discreto
El último partido de Griezmann con el Atleti, antes del domingo, había sido el 18 de mayo de 2019, en el Ciutat, ante el Levante. Dos años, tres meses y
26 días después, el francés regresó. Y, aunque pasó casi del fichaje al once, con sólo cuatro días de entrenamiento, era mucha la esperanza de su principal valedor, Simeone, que lo alineó junto a Correa y Suárez. Modificó su dibujo, pergeñó un 5-2-3 que fue un desastre. Descompuesto su equipo, el Espanyol le ganaba 1-0 al final de los primeros 45’. Y es que ese Griezmann que saltó el domingo en Cornellà no es el Griezmann que se fue. Tampoco el Atleti.
De aquel once en el Ciutat sólo dos futbolistas de entonces repetían, Correa y Koke. Un tercero esperaba en el banquillo (Lemar). Y ya. Todo lo demás nuevo (Oblak también estaba, por supuesto, pero aquel día ante el Levante no jugó sino que lo hizo Adán). Obligado el
Atleti a hacer transición aquel verano que Grizi se fue, por su marcha y la de los primeros soldados del Cholo (Godín, Juanfran y Filipe). Ocho fichajes. Al año, campeón de Liga. Mientras, en Barcelona, Griezmann languidecía.
Sus primeros partidos como culé esta temporada, ya el Barça sin Messi, el cero fue el dominador de sus números. Cero remates, cero pases, cero todo. Y con el Atlético en su reestreno no estuvo mucho mejor. Su aportación en su rentrée fue más bien gris, como si siguiera en el Barça. Cero remates a puerta, dos fuera. Siete pases errados (17 buenos), pases en profundidad buenos, cero, como pases en largo. Centros, uno. Pases de espalda, dos. Recuperaciones, dos. Balones perdidos, diez. Veces regateado, dos. Sólo en un aspecto destacó, un brote verde al que agarrarse, su sonrisa, su entrenador: ocasiones creadas. Tres, el que más. A la memoria, 2014, cuando llegó al Atlético de la Real. También le costó. Hoy, aunque haya pasado las mili del ‘Profe’ y el Cholo, llega a otro Atleti. Deberá ajustar su capa a los moldes. Y tratar de volver a volar.
Cifras El francés remató dos veces fuera y perdió 10 balones en Cornellà
“Respecto a la vuelta de Griezmann yo soy poco odiador. No creo que se arregle nada por silbar...”
Lo lógico hubiera sido llevarse las manos a la cabeza al ver cómo se diluía y era cambiada la delantera titular del Atleti en su visita a Barcelona. Había muchas esperanzas puestas en el regreso de Griezmann, otras tantas en la vuelta de Suárez tras el parón de selecciones, y siempre nos quedaba Correa por si estos dos primeros nos fallaban. Pues se podría decir que nos fallaron los tres y que el que mejor estuvo de todos fue Simeone. Tiene que marear mirar para atrás hacia ese banquillo y ver a toda esa peña de pequeños geniecillos esperando el momento para salir, De Paul, Cunha, João Félix, Lemar, etc. Así que Simeone tiró de fondo de armario de luxe y cambió a los tres de arriba para dar salida a otros tres titulares. Pero lo lógico era llevarse las manos a la cabeza al ver que el resultado no era bueno y se prescindía de Correa, Suárez y Griezmann. El Cholo no solo demuestra que es el más listo de la clase, también viene demostrando habitualmente ser el más valiente de la clase. Le podían haber caído de todos los colores si le sale mal, pero no conozco otro entrenador al que le dé más igual lo que piensen los demás. Salió bien el experimento, y si a alguno le molestó el añadido de diez minutos le dejará de molestar cuando dicho añadido juegue a su favor. Y ya está.
LRespecto a la vuelta de Griezmann al Atleti, yo soy poco odiador. No creo que se arregle nada por silbar, y si tenemos a uno de los mejores jugadores del mundo con nosotros, disfrutémosle mientras juegue de rojiblanco.
uego ya se verá. Me engatusó Griezmann en su época rojiblanca, con sus bailecillos tras sus goles milagrosos. Sentí más pena que rabia cuando le vi descolocado y en otra casa. Llevo muy mal escuchar pitos en mi estadio contra alguien que viste la camiseta del Atleti, me pone triste y me parece contraproducente en todos los aspectos. Pero la gente es libre de demostrar lo que quiera, donde quiera y en el momento que quiera. ¡Seguimos sumando!