“Tebas me quería multar si apoyaba a Bukaneros”
Trashorras recibió una carta: podían caerle 10.000¤
Trashorras rompió su silencio en una extensa entrevista en Onda Madrid. El capitán del Rayo habló sobre las polémicas que han rodeado al club y a él mismo durante los últimos meses. Todo empezó con el descenso del equipo a Segunda, con la derrota de Anoeta, sobre la que siempre planeó la sombra del amaño: “Si tuviera la convicción de que un compañero mío se ha vendido, habría pasado algo grave. No tengo pruebas. Me consta que había cinco o seis jugadores señalados, pero pongo la mano en el fuego por el vestuario del año pasado. Si se demostrase, pediría cárcel para él o lo que haga falta”.
No fue más tranquilo el inicio de esta temporada con Sandoval en el banquillo. Trashorras se vio implicado en el rifirrafe entre el técnico y Miku: “No he tenido ningún problema con Sandoval. Siempre intenté ayudarle. Él sabe que he abroncado a Miku por su actitud, pese a ser amigo mío. Mi hija vino llorando del colegio por sus palabras llamándome ‘capitán de mierda’ y el técnico me pidió perdón delante de mis compañeros. Yo le perdoné. Me dijo que lo que le importaba era ser buena persona y no buen entrenador. No sé si lo es, el tiempo dirá. El respeto que tuve hacia él no lo tuvo conmigo”. También negó que la plantilla entonces le hiciera la cama: “Yo no soy así ni tengo ese poder. Le echaron los resultados como a Baraja”.
Durante los últimos partidos del Pipo, Trashorras desapareció de las convocatorias. El técnico siempre esgrimió motivos deportivos y el capitán lo quiso aclarar: “Tenía muy buena relación con él. Hablábamos mucho, me consideraba importante. Él me explicó mi suplencia. Acepté quedarme fuera de la lista, mi sorpresa fue la prohibición de entrar al vestuario. Me impactó. Me molestó que pareciese que nosotros podíamos hacer daño al vestuario. Fui a hablar con Baraja y me dijo que era deportivo. Ahí quedó la cosa”. Ahora, Trashorras ha recuperado su sitio en el once y respira ilusión con la llegada de Míchel al banquillo: “Necesitábamos un entrenador como él, con esa idea. Las de los otros entrenadores no nos han beneficiado”.
También se refirió a los tuits de Toño: “Yo no los pondría. Vulneras la decisión del club de no dejarnos hablar. Me llegó un papel de Tebas que como apoyara a Bukaneros me caería una multa de 10.000€”. Y admite que no se baja del barco: “Me quedaría en Segunda B”.
Anoeta
“Pongo la mano en el fuego por esa plantilla. Si se prueba, a la cárcel”