Torres, estable tras un traumatismo craneal
Chocó con Bergantiños. Se quedó en A Coruña por precaución
Fernando Torres pasó ayer la noche en A Coruña a causa de un traumatismo cráneo encefálico sufrido tras un choque con Bergantiños. Todo quedó, en principio, en un susto gracias a que contó con la rápida intervención de sus compañeros y de los médicos. En el minuto 87 de partido Bergantiños se lanzó para buscar un balón aéreo en el área colchonera. El deportivista acudió fuerte al salto y percutió sobre la espalda de Fernando Torres de forma contundente e inesperada para el delantero. El Niño recibió el golpe en el aire y ya antes de caer se adivinaba alguna consecuencia. La caída, con el choque de la cabeza del ariete contra el suelo, aumentó la alarma.
El delantero quedó tendido inconsciente, tumbado sin moverse y rápidamente sus compañeros y los jugadores deportivistas solicitaron la entrada de las asistencias. Fueron unos momentos dramáticos. Prestos, Vrsaljko, Gabi y Giménez se lanzaron sobre el Niño para atenderle.
Con buen criterio, pusieron su atención en que la lengua no provocara la asfixia del futbolista. No dudaron, sobre todo el jugador croata, en introducir sus manos en la boca de Torres para dejar libre la vía aérea, de manera que ni la lengua ni la musculatura faríngea obstruyeran el paso del aire. Lo consiguieron. Las asistencias para entonces ya tomaban el terreno de juego. Fue entonces cuando se vivieron los momentos más dramáticos ya que Giménez se separó de su compañero tendido en el suelo llevándose las manos a la cara. Se respiraba miedo. El propio Bergantiños no se separaba de la escena impresionado. Pero ya sobre el terreno de juego empezaron a llegar las primeras noticias tranquilizadoras. Tanto el Mono Burgos como Gabi levantaban los pulgares. Eso fue segundos antes de que el jugador con el collarín cervical e inmovilizado abandonara el terreno de juego, evacuado al hospital HM Modelo de A Coruña, muy cerca de Riazor.
El jugador estaba ya consciente y estabilizado, incluso había hablado con algún compañero. Fue acompañado por el doctor Lariño, del Deportivo, quien confirmó las primeras impresiones. Incluso valoró la actuación de sus compañeros “Fue perfecto lo que hicieron sus compañeros, Gabi incluso se llevó un mordisco”. Los galenos confirmaban que el jugador sufría un traumatismo cráneo encefálico, pero las primeras pruebas eran positivas. Tanto el escáner cervical como craneal no evidenciaban alteraciones.
El propio Bergantiños encontraba así alivio. “Le costaba respirar, se oía un ruido, yo rezaba para que no fuera nada, quería pedirle perdón”, afirmaba el deportivista antes de acercarse al hospital junto a Pepe Mel y Ríos. Los familiares del Niño, apenas media hora después de terminado el partido, seguían llamando a la calma confirmando que el jugador estaba ya estable.
Doctor Lariño: “Sus compañeros lo hicieron bien. Gabi se llevó un mordisco...”