Un ángel de 21 años sobrevuela en Cluj-Napoca
Máximo taponador del torneo
Tal vez cuando vuela con esos brazos interminables hacia uno de esos tapones imposibles, Juancho Hernangómez (Madrid,
1995), fantasee con el histórico tapón de LeBron James, su gran referente, a Andre
Iguodala en el séptimo partido de las finales de 2016 entre
Warriors y Cavs. Empapado en sudor, admitió que el día de su debut ante Montenegro “estaba nervioso”. No se le notó. Menos todavía contra la República Checa. A sus 21 años, Juancho se come la pista aunque eso debe extrañar poco a Jordi Fernández, ayudante de Scariolo y entrenador asistente de los Nuggets, la franquicia en la que Juancho ha iniciado su carrera en la NBA. “Jordi ha hecho que mi camino fuera mucho más fácil desde que le conocí en la Summer League.
A veces cuando llevas cinco partidos sin jugar, vamos a cenar y te anima. No es sólo un entrenador, es la persona que está ahí”, contaba a Sergio Andrés en una excelente entrevista este julio en AS.
Aunque se hayan jugado sólo dos partidos del Eurobasket, la dimensión de Juancho toma cuerpo por aparecer en la lista de máximo taponador del torneo (5) junto a Porzingis, una estrella ya consolidada. El amigo de su hermano Willy en el Madison. Juancho no tenía un puesto asegurado en el Eurobasket pese a estar en la lista que empezó la concentración en Madrid. Scariolo quería ver cómo mezclaba en el vestuario con los Gasol y el resto de vacas sagradas. Entonces entró en acción el presidente de la FEB. Garbajosa, inmejorable conocedor de grupos humanos, fue a por
Ricky, 26 años, para que hiciese de calzador entre los 37 años de Gasol y Navarro y los irreverentes 21 de Juancho. Los resultados, cuentan, son espectaculares.
Nexo de unión
Ricky hace de ‘pegamento’ con las vacas sagradas