El Eibar salva un punto tras un 0-2 del Levante
Los armeros tiraron de casta ante un rival conservador
Una reacción agónica del Eibar le permitió empatar frente al Levante en Ipurua porque, cuando todo parecía perdido, los armeros tiraron de casta y lograron sumar otro punto. Hicieron tantos méritos como errores acumulan durante este extraño inicio liguero.
Da igual cuántos defensas pongan. Jugando con cinco también les pasan las mismas cosas. Balones a la espalda y cualquier rival los aprovecha para marcar. Ya no parece ese equipo aguerrido que tan pocas facilidades concedía.
Salió mejor el conjunto azulgrana, acercándose con frecuencia a las inmediaciones del área visitante. No obstante, siguió demostrando otra de sus carencias. Le cuesta horrores marcar goles. Sólo lleva cinco tras diez jornadas.
La primera media hora fue de absoluto dominio local. Un auténtico asedio, aunque sin convertirlo en ocasiones claras. El bloque valenciano esperaba su momento agazapado y lo encontró. Ivi combinó con Morales y éste no perdonó a sus ex. No lo celebró. Tres minutos después, otro fallo de la zaga eibarresa dejaba solo al madrileño para asestar otro golpe. Bardhi empujaba hacia las redes su milimétrico pase.
Los jugadores locales salieron al segundo acto muy tocados anímicamente. Aun así, continuaron luchando y fruto de esa brega consiguieron unas valiosísimas tablas.
Arbilla convirtió de forma magistral una falta. Quedaba mucho y querían más. Mendilibar movió el banquillo dando entrada a futbolistas dinámicos como Charles o Juncà. Entre los dos e Inui fabricaron la igualada que logró el brasileño.
Los azulgrana intentaron la remontada de todas las maneras posibles, si bien el marcador se quedó tal cual estaba.