Ferrari ‘ficha’ al hijo de Juan Pablo Montoya
Sebastian, de 12 años, en el programa de jóvenes
En un mundo en el que la velocidad es clave, la precocidad se abre paso a marchas forzadas. El kárting no solo reparte a los mejores entre los equipos poderosos sino que los propios equipos de F1 pescan rápido. En los últimos días dos movimientos han sido noticia: Ferrari ha incluido a Sebastian Montoya, hijo de Juan Pablo, en la FDA, el programa de jóvenes de la Scuderia junto a jóvenes talentos como Leclerc (F1 con Alfa Romeo Sauber), Fuoco (GP3), Alesi (GP3), Zhou (FIA F3) o Enzo Fittipaldi (F4). El vástago, de 12 años, del expiloto de F1 y bicampeón de la Indy 500 disputará el Europeo del CIK FIA de kárting, en la categoría OK Júnior, con el poderoso Tony Kart, del que forma parte el leonés Vidales, doble subcampeón del mundo.
Sin embargo, la llegada del primogénito de The One coincide con la pérdida del prodigioso Andrea Kimi Antonelli, de 11 años, que Ferrari se tomó con calma ya que no querían ligarse a él con un contrato a largo plazo, pese a estar ya ganando para Tony Kart desde los 9 años y que fue recomendado directamente a Rivola, director de la Ferrari Driver Academy, por Giancarlo Minardi.
Andrea probó el simulador de F4 en Maranello con almohadones para llegar a los pedales (medía 133cm) y se quedó a ocho décimas del récord. Volvió para probar con el simulador de F2 y su resultado fue tan asombroso que Rivola quiso incluirlo en la FDA, pero los gerifaltes rojos lo pararon... Las dudas han hecho que Mercedes se adelante y, por orden directa de Wolff, le han incluido en su programa de formación.
Su padre, Marcos, con experiencia en GT como piloto y como dueño de equipo, hizo viral su talento en las redes con su hijo conduciendo un Lamborghini Huracán de 620 CV, manejando volante y caja de cambios. Antonelli corre con Energy Corse y en su debut en las WSK Champions Cup, categoría Mini, no dio opción dando argumentos a los que le señalan como el elegido para rememorar éxitos en F1 para Italia.