El Marsella, un equipo entusiasta y peligroso
■ Nadie en Francia, a principios de temporada, esperaba que el Olympique de Marsella llegase a la final de la Europa League. El OM, tal y como se conoce al otro lado de los Pirineos, está todavía en proceso de transformación después de la compra del club por parte de Frank McCourt, un hombre de negocios americano. Pero, en los últimos meses, se ha producido una especie de química en el vestuario, gracias sobre todo a Rudi García. El entrenador de origen español, que se hizo famoso con el Lille y el Roma, ha construido un grupo entusiasta y sacado lo mejor de algunos futbolistas de talento. Empezando por Dimitri Payet, que volvió a Marsella en enero del 2017 después de pasar por el West Ham. Este medio ofensivo, casi mediapunta, es el líder ofensivo de los franceses, mete muchos goles y tiene una gran efectividad en los lanzamientos de libres directos. Además desata una gran alegría en su juego y tiene posibilidades de ir al Mundial de Rusia con los Bleus.
Su compatriota, el delantero Florian Thauvin, también aparece como un futbolista decisivo con sus goles y sus asistencias y ha sido elegido varias veces ‘Jugador del Mes’ de la liga francesa. Atrás, cabe señalar el gran nivel del central Adil Rami, ex del Valencia y del Sevilla, que contagia a los suyos un gran espíritu de conquista. Pero nadie gusta más a los aficionados que el mediocentro Luiz Gustavo, que ha llegado el pasado verano y que se ha convertido en el ídolo del estadio Vélodrome. El brasileño pone orden en el centro del campo y aparece, sin duda, como el futbolista más imponente del equipo francés, tácticamente hablando.