Sólo caben 10.340 aficionados en la final de la Supercopa
El Lilleküla Stadium de Tallin es el feudo más pequeño que la ha acogido nunca ● Cada club sólo dispondrá de 2.068 localidades
La Supercopa enfrentará al Real Madrid, campeón de la Champions, y al Atlético, ganador de la Europa League, el 15 de agosto en Tallin (Estonia). Cada club recibirá el 20% del aforo, el 35% será puesto a la venta y el 25% restante se lo queda la UEFA para sus compromisos.
El derbi de la Supercopa de Europa, que enfrentará a Madrid y Atlético como vigentes campeones de Champions y Europa League el 15 de agosto, tendrá lugar en un ambiente lejano a lo que ambos equipos acostumbran. El Lilleküla Stadium de Tallin (Estonia), casa del Flora Tallin y de la selección estonia, acogerá el choque entre los dos campeones continentales con sus escasos 10.340 asientos, si bien es cierto que la UEFA explicó en el momento de la designación (hace casi dos años) que el aforo se ampliaría para el partido, aunque sin especificar de momento en qué medida.
La UEFA tiene por norma dedicar el 75% (7.755 en este caso) de las entradas en la Supercopa de Europa a los aficionados y quedarse con el 25% (2.585) para sus compromisos de patrocinios e invitaciones. Ese 75% se divide del siguiente modo: el 20% (2.068) para los aficionados de cada club y el 35% restante (3.619) para ser vendido al público general a través de las plataformas de la UEFA. Los precios, eso sí, vienen siendo contenidos en el torneo: hace un año, para el Madrid-Manchester United de Skopje (Macedonia) oscilaron entre los 15 y los 50 euros.
Desde que abandonó la sede fija de Mónaco (Estadio Luis II, 18.500 espectadores), la UEFA ha aprovechado para pasear la Supercopa por todo el continente, combinando estadios de distinto tamaño: ha pasado por Praga (17.500), Cardiff (25.000), Tiflis (52.000), Trondheim (18.000), Skopje (30.500)... y ahora Tallin, con el aforo más pequeño que haya tenido nunca una Supercopa. En 2019 toca Estambul (42.000) y en 2020, Oporto (50.000).
Precios Vienen siendo baratos: en 2017, entre 15 y 50 euros