Fallout 76: la saga de Bethesda también se pasa al multijugador
Apuesta arriesgada de uno de los grandes juegos de RPG
Fallout, uno de los grandes iconos del mundo de los videojuegos, ha cedido a la corriente actual del multijugador y, conservando íntegramente su filosofía, da un giro radical a su forma de juego.
La historia sigue ambientándose una Norteamérica devastada por un holocausto nuclear, en un universo que mezcla elementos culturales y sociales de los años cincuenta con tecnología superavanzada.
Mundo persistente. Al igual que en otros Fallout, la aventura comienza cuando los supervivientes abandonan un refugio nuclear para descubrir cómo es el nuevo mundo. A diferencia de anteriores episodios no hay un hilo argumental predefinido sino que
es el jugador el que marca el devenir de la aventura en función de las decisiones que va tomando.
Solo o en compañía. El juego de Bethesda está pensado para ser disfrutado en compañía, formando equipos de hasta cuatro jugadores, que pueden actuar coordinadamente o bien elegir cada uno qué hacer en un determinado momento. También existe la posibilidad de realizar el viaje en solitario, aunque se pierde gran parte del encanto del juego y supone una desventaja táctica frente a otros jugadores.
Sobrevivir es complicado. El yermo en el que se ha convertido la Tierra está repleto de peligros: saqueadores, animales salvajes, mutantes... Y los recursos para mejorar armas, vestimenta, campamentos son mucho más escasos. Por lo que todo es más difícil. También están los otros jugadores, aunque Bethesda ha implementado un sistema de sigilo que permite evitar la mayor parte de los enfrentamientos.