Bacca y Ekambi aflojan la corbata al Villarreal
Sus goles al Lega le alejan a cuatro puntos del pozo
Bacca es un seguro de vida. Le da igual que pese a sus 11 goles no sea indiscutible, que sólo haya jugado seis partidos completos. Su amor propio no tiene precio. Ante el Leganés dio una exhibición de cómo juega un delantero de espaldas, de cómo un atacante abre huecos y, sobre todo, de cómo un depredador se deja la piel y está donde debe cuando su equipo más le necesita. Su gol en el 64’, por su viveza en un rechace, no será recordado por su belleza, aunque sí por su valía. Con su aparición y otra más de Ekambi, el Villarreal ya tiene a seis rivales por detrás suya y pone el descenso a cuatro puntos.
El Villarreal confundió en algunos momentos del primer tiempo no angustiarse, como solía y no puede permitirse, con la parsimonia en la circulación. El Leganés, atrincherado,
no daba opciones en el juego directo, por lo que la aparición entre líneas de Chukwueze era necesaria. Él pudo adelantar al Villarreal nada más empezar. Su peinado le dejó en fuera de juego e hizo inútil una finalización magistral. Suya fue también la segunda mejor ocasión. Y, cómo no, de su imaginación nació una gran jugada desaprovechada por Ekambi a bocajarro.
El Leganés no cambió nada en su regreso del descanso. Ya salvado, veía con buenos ojos el punto. Orden y solidaridad. Poco más. Hasta que apareció Bacca. Con media hora por delante el Leganés decidió desatarse y Braithwaite dio un buen susto a La Cerámica. Ekambi pareció sentenciar, pero El Zhar marcó en el 87’ de penalti. Regaló ocho minutos de miedo y accidentes que, esta vez, no trajeron un disgusto a deshoras.