CONCLUSIONES DE PRETEMPORADA La parrilla se comprime
Mercedes es la referencia para la temporada 2020, Ferrari sorprende con su perfil bajo en pretemporada y Red Bull tiene cosas interesantes de cara al GP de Australia. La zona media no puede apretarse más de lo que aparenta
De Barcelona a Australia, donde en dos semanas se celebrará el primer gran premio de la temporada 2020. Los test, a pesar de las habituales estrategias de ocultación por parte de los equipos, dejan varias conclusiones y una parrilla más o menos definida delante, pero muy abierta en la zona intermedia. Es imposible ordenar a McLaren, Alpha Tauri y Renault, aunque sí está claro que Racing Point, al menos al principio, no está en ese grupo.
Una evolución sobre el monoplaza que ya era la referencia. Impecable en paso por curva, pero este año además el motor muestra una mejoría en potencia. Sus problemas residen en la fiabilidad, concretamente en lo relativo a la refrigeración del propulsor. Y eso no es bueno cuando en invierno la temperatura no es elevada. El ‘DAS’, su invento, parece útil en tandas de clasificación.
Un gran coche aunque no sea brillante a una vuelta como su predecesor y una buena base para seguir evolucionando durante la temporada sin estancarse, como con el SF90H, en el paso por curva. Ferrari ha dado un paso de gigante en los virajes lentos, su punto débil, a costa de ceder velocidad punta. Aunque transmiten pesimismo desde Maranello, saben que el SF1000 funciona y lucharán por victorias.
A pie de pista, parece un monoplaza tosco exigido al máximo. Verstappen lo lleva al límite, pero salen los tiempos en casi todas las circunstancias, con frío, calor, goma blanda y goma dura. Red Bull se ha centrado en 2020, comprometiendo su inicio para 2021.
Aspiran a la pole o el podio en el GP de Australia. Es el Mercedes W10 que ganó el Mundial hace un año. Es una delicia en el asfalto, se agarra a las curvas y puede pasar a Ferrari o Red Bull durante los primeros grandes premios.
El optimismo es real, aunque hayan completado una pretemporada de perfil bajo y evitando vueltas rápidas descargadas de combustible. Este MCL35 se mueve bien en la pista, mejora a su predecesor y les acerca a los grandes. En Australia deben entrar en la Q3.
El AT01 llama la atención, es un salto de prestaciones con respecto al último Toro Rosso. No es un Red Bull ni una copia de Red Bull. Se inspiran en ellos y utilizan sus suspensiones y su caja de cambios.
El RS20 tiene potencial. Se inspiran en el morro de Mercedes y son más extremos que McLaren en ese apartado. Aunque el motor apenas evoluciona, corta en seco con el pobre RS19.
Muy similar al Ferrari de 2019, compartirá sus puntos débiles (problemas en las curvas) sin disfrutar de la fortaleza, un motor que fue mayúsculo pero pierde prestaciones en 2020.
Un monoplaza que casi hay que detener para que entre en las curvas. El Sauber decepciona. Se esperaba que siguieran los pasos de Racing Point ayudados por Ferrari, pero mantienen sus señas de identidad.
En un año han progresado muchísimo pero da la sensación de que no da para más. Otra temporada complicada por delante con problemas no resueltos para un histórico de la Fórmula 1.