A la piscina 66 días después
Las Selecciones de sincro, waterpolo y la natación, al agua
supercontenta”, repasaba. Durante el confinamiento ha desgastado la cinta.
Las piscinas y los pabellones cubiertos también abrieron, tras varias desinfecciones. Pero con turnos y restricciones de aforo del 30%. Carolina Marín aparecerá en los próximos días, procedente de Huelva. “¡Me quería morir!”, suelta una carcajada el gimnasta Ray Zapata después de subirse a hacer un vuelo en las paralelas, probar la cama elástica y agarrar las anillas. “No había estado tanto tiempo parado en toda mi carrera”, se justifica. Se entrenó solo, con la única compañía del técnico Benjamín Brago y la música que se puso para combatir el silencio a la espera de que en dos semanas vayan llegando el resto de compañeros. Los Deportistas de Alto Nivel pueden solicitar una autorización para trasladarse de provincia y retornar a los centros, pero algunos no disponen de alojamiento. “Hay que cumplir las medidas, porque son justas”, recuerdan todos. Hay que ir dando pasos seguros hacia Tokio, ya en 2021.
Aleluya”, escribía Mireia Belmonte en su Instagram con una foto de la piscina descubierta del CAR de Sant Cugat. Una imagen con muchas horas de espera, las que han tenido que aguantar los nadadores, quienes 66 días después han podido volver a nadar en su hábitat. “En los primeros 300 metros tenían que pensar cómo respirar, no se acordaban”, explica Jordi Jou, técnico del CN Sant Andreu: “Luego ya fue mejor. Es como volver de unas vacaciones”.
El primer turno fue a las 08:00. Jessica Vall, Mireia Belmonte, Marina García, Lidón Muñoz, Albert Escrits y África Zamorano inauguraron la piscina y las medidas de seguridad del CAR. “He conducido con mascarilla y guantes. Al llegar, bajé la ventanilla y me tomaron la temperatura. Me han dicho dónde debía aparcar. El día anterior ya me confirmaron que nadara por la calle 4. Hemos hecho todos un calentamiento a dos metros de distancia y nos pusimos a nadar. En total, cuatro kilómetros”, relata Vall.
Los nadadores se entrenarán todos los días y verán cómo el grupo se ampliará con la llegada de los que residen fuera
Adaptación “Al principio pensaban cómo se tenía que respirar”
Ramon Terrassa es el director del CAR de Sant Cugat. Lleva semanas trabajando en la reapertura del centro y ayer recibió también la visita de la Generalitat.
—¿Cuál es el protocolo de un deportista desde que entra hasta que sale del CAR? —Cuando llega comprobamos que tiene cita previa y que lleva el material adecuado (guantes, mascarilla...). Le tomamos la temperatura. Y le indicamos dónde debe aparcar. Va directo a la instalación y se entrena. Cuando acaba, se va. No hay de Barcelona. Joan Lluis Pons, Alberto Martínez y Jimena Pérez, que pertenecen a los grupos de entrenamiento de Jou y Fred Vergnoux, se incorporarán esta semana. Mireia ya tendrá doble sesión el próximo lunes.
Al margen de la natación, el waterpolo y la sincronizada también han vuelto. La seleccionadora Mayuko Fujiki, con mascarilla, dirigió una sesión individual: las nadadoras se reparten a lo largo del día en la piscina interior de la nueva instalación del CAR. El waterpolo tomó después el relevo de la natación en la piscina descubierta. “Veíamos a las compañeras a dos metros. Teníamos que chillarnos para comunicarnos”, bromea la portera de waterpolo Laura Ester, que estuvo con otras integrantes de la Selección femenina, como Anni Espar, Marta Bach, Pili Peña o Roser Tarragó.
“Es la vez que menos hemos tardado en tirarnos a la piscina. La sensación fue rara, como si el agua pesara, como si fuera un algo compacto”, explica Ester, quien advierte que de momento no pueden “tocar el balón”. “Debo volver a acostumbrarme a estar en la portería”, reconoce la meta, aunque para ello ha intentado en casa hacer ejercicios de reacción y coordinación con una bola de tenis. Por la tarde, acudió la masculina.
“Para mí este es el inicio de la pretemporada 2020-21”, dice Jou. La natación vuelve a la piscina consciente de que su camino a Tokio 2020 es un auténtico desafío.