Normas de la nueva normalidad
Si las cosas evolucionan como están evolucionando, el 21 de junio se pueden dar las condiciones para levantar el estado de alarma en toda España. Si se levanta, puede haber movilidad sin restricción en nuestro país”, anunció ayer el ministro de Sanidad, Salvador Illa. Minutos antes, el Consejo de Ministros acababa de aprobar el decreto ley que regulará las normas de la nueva normalidad y que estarán vigentes hasta que haya una vacuna o un tratamiento eficaz contra el COVID-19.
La nueva normalidad correrá a cargo de las comunidades autónomas, pero las bases comunes serán las recogidas en el decreto de “medidas urgentes de prevención, contención y coordinación”, aprobado ayer. Sanidad se reserva la posibilidad de retomar las riendas si la situación de la pandemia se dispara en algún lugar. Este decreto ley deberá ser aprobado por el Congreso.
Libertad de movimientos para viajar por España.
La distancia social mínima obligatoria será de 1,5 metros.
La mascarilla será obligatoria al coger el metro, un autobús, un avión o un tren. Será obligatorio llevarla en lugares públicos o privados abiertos al público, y en los cerrados y abiertos si no se puede mantener la distancia física entre personas. En los coches privados, siempre que los ocupantes no sean convivientes. Incumplir esta obligación lleva multa de 100 euros.
Sin límite de personas.
Aena hará controles sanitarios a los pasajeros internacionales, y debe prever el control sanitario para los viajeros.
Deberán tomar medidas para evitar las aglomeraciones de pasajeros. Los operadores tendrán que conservar durante cuatro semanas el registro de pasajeros cuando tengan asiento asignado para seguir posibles trazados de contagio.
El teletrabajo sigue siendo recomendado. Las empresas deben disponer que en los puestos de trabajo se mantenga la distancia de seguridad de 1,5 metros. Los espacios deberán ser limpiados y ventilados, además de disponer de agua y jabón o geles hidroalcohólicos a disposición de los trabajadores. Se debe organizar la entrada y salida a la empresa para impedir que en los accesos se originen concentraciones que puedan favorecer un posible contagio. Ningún trabajador en