El Andorra sueña tras su cuarta victoria consecutiva
■ El MoraBanc Andorra desea el playoff. Con insistencia, la verdad. El equipo del Principio venció en Murcia al UCAM y sumó su cuarta victorias consecutiva. Todas ellas en un lapso de tan solo nueve días. Casi nada. Ahora mismo, y a falta de dos jornadas para cerra la fase regular, es octavo de la clasificación con 20 triunfos empatado con el Herbalife Gran Canaria y el Baxi Manresa, al que solo le resta un partido. Los universitarios, por su parte, se despiden virtualmente de su opciones de regresar a las rondas por el título: no las pisan desde 2016.
Jelinek fue el motor ofensivo (17 puntos) de un Andorra que inició duro el partido, con un parcial 15-25 en el primer cuarto. La aparición de Davis y Strawberry permitió a los locales tomar la iniciativa en el segundo (43-34) y el tercer cuarto (63-53). En el último, la tranquilidad de Tunde desde la línea de personal, un 2+1 de Hannah y un robo de Sy dieron la victoria a los de Ibon Navarro.
Por otro lado, el TD Systems Baskonia recibe al Unicaja (12:30, #V) para cerrar ambos su ronda de partidos aplazados por la COVID. Los vitorianos necesitan la victoria para defender la cuarta plaza y los malagueños, para mantener vivas sus esperanzas de clasificarse para el playoff.
EI Bilbao Basket se apunta a seguir en la pelea, a meter presión al Estudiantes. Lo tiene en chino, pero no se da por vencido. Estaba obligado a ganar al Fuenlabrada y lo hizo, con enorme agonía, pero nadie dijo que esto iba a ser fácil. Con un pleno en los tres partidos que le restan, mantendría la categoría y si el Estudiantes no derrota al Burgos, en lo único que le queda, hasta puede perder ante el propio equipo castellano, Real Madrid o Joventut. Los hombres de negro refrescaron una sensación, la de la victoria, que no tenían desde hace mes y medio, en la pista del Murcia.
El Fuenla no se jugaba nada, pero se comportó como si su permanencia estuviera sobre la mesa. Compareció con diez, por las ausencias de Emegano, Urtasun y Marc García, y por no poder echar mano del filial, que buscó y encontró el ascenso a LEB Plata. Tenía tres bases y el resto, grandes. Raventós eligió la presión alta en todo momento. Mumbrú dejó fuera a Serron. Regresó Balvin, como estaba cantado, aunque el coronavirus le ha dejado para el arrastre.
Kulboka arrancó el motor con un inicio atronador y Jenkins puso la puntilla, y eso que Alexander (36 de valoración) hizo un partidazo. En el cara o cruz final, fue importante una antideportiva de Novak a Athinaiou, revisada largo tiempo por los tres árbitros.