El Amorebieta arranca el sueño de Segunda

El club más humilde, con 18 jugadores del ascenso

EI Amorebieta ya está en marcha. Inició ayer la pretemporada más ilusionante de su historia, en la que por primera vez competirá en Segunda, el peldaño anterior a la élite. Los azules aún se frotan los ojos tras culminar una sorpresa para la eternidad en el playoff de ascenso celebrado en Badajoz. Un pueblo de 18.000 habitantes en un escaparate inigualable. El año pasado la plantilla entera cobraba 250.000 euros, nadie se llevaba a casa más de 1.500 al mes. La entidad, de 96 años y con 900 socios, vive días de gloria.

Iñigo Vélez de Mendizabal, el padrino del milagro, afronta su cuarto curso consecutivo al frente del cuadro vizcaíno. La mirada está puesta en el 14 de agosto, con la visita al Girona en el estreno en la categoría.

En la primera sesión del año estuvieron presentes muchos jugadores del curso pasado que se mantienen, hasta 18: los porteros Mikel Saizar y Unai Marino; los defensas Iker Seguín, Aitor Arregi, Mikel Zarrabeitia, Aitor Aldalur, Aimar Sagastibeltza, Beñat Garro, Jon Irazabal, Beñat Leiza y Unai Uberuaga; los medios Mikel Álvaro, Iker Bilbao, Gorka Larrucea y

Asier Etxaburu; y los delanteros Iñigo Orozko, Koldo Obieta e Iker Unzueta.

Poco a poco van llegando caras nuevas. Es el caso del defensa zornotzarra Oier Luengo (Bilbao Athletic), el mediocentro Markel Lozano (Celta B) y el atacante Iker Amorrortu (Calahorra), todos con pasado en el Amore. Junto a ellos, han llegado el central Óscar Gil (Racing), el lateral izquierdo Josu Ozkoidi (Sabadell) y el centrocampista Lander Olaetxea (UD Logroñés). San

José, firmado ayer, es el fichaje estrella. “Ha puesto muchísimo de su parte. Es importante que esté con nosotros, nos va a dar muchísimo”, apunta el director deportivo, Asier Goiria.

Goiria admite que el mercado “siempre es complicado” y que “hay gente que mira al Amorebieta como el equipo humilde y cuesta un poco” convencer a quien se quiere fichar. Aunque también se felicita de que “cuando vas mostrando tu proyecto, la gente va conectando”.

Vélez de Mendizabal avanzó que el Amore abre fuego “con respeto a todo el mundo”, pero también tiene claro que a veces “puede más la ilusión de hacer las cosas bien que el vértigo”. Urritxe no fue homologado y tendrán que mudarse a las instalaciones Lezama.

El técnico “Puede más la ilusión de hacer las cosas bien que el vértigo”