INTERESADO POR LA COLECCIÓN DE AS
grande para un deportista. —Lleva a Ceballos, Asensio y Merino, del 96. ¿Pasó por su cabeza convocar a algún futbolista que no fuera de esa generación?
—No, creo que no. Primero teníamos que tener garantía, porque no podíamos prever el futuro y las listas había que prepararlas con mucha antelación. En un primer momento decidimos hacer una base muy importante. Cuando las circunstancias se normalizaron, esa idea primera que tenía es la que he reforzado. Es que de aquella generación que ganaron el Europeo hay nueve que se pasaban de edad. Sólo eligiendo a tres de aquellos, seis se quedaban fuera de los Juegos. Eso ya era una injusticia. No es un favor ni un regalo, se lo merecen porque tienen una calidad individual espectacular, son de los mejores del mundo. —¿Le molestaba la pregunta de Ramos en cada conferencia de prensa?
—No, con naturalidad. Tengo una gran relación con Sergio y su familia. Estoy seguro de que entiende que esta decisión que yo tenía tomada desde hace tiempo es la más honrada y honesta. Como buen profesional que es, y siendo compañero de los que vienen, él lo entiende. —¿Cómo se consigue en un grupo tan heterogéneo el buen ambiente?
—Primero uno tiene que estar convencido de que eso es muy importante y yo lo estoy. Para mí es prioritario apostar por el grupo. Antepongo ese concepto antes que cualquier individualidad. Intento que ese mensaje cale. También son jugadores que llevan mucho con nosotros y en el proceso de formación hemos tratado que el mensaje vaya calando. En estas edades ves que ha sido eficaz el trabajo, porque lo tienen interiorizado. Eso facilita el trabajo. El grupo está muy unido, cohesionado… Eso en los momentos difíciles, porque en estos torneos siempre hay un día malo, hace que se supere y puedas vencer estas dificultades. Voy a contar una anécdota de este grupo, en el Europeo de 2019. Cuando ganamos a Polonia, nos metimos en semifinales y nos clasificamos para los Juegos. Les dejamos libre y muchos jugadores tenían allí a familiares. Pues bien, decidieron irse los 23 juntos a un sitio para estar ellos solos. Era razonable que alguno se quedara con su familia, pero se fueron los 23. Cuando me enteré me sentí orgulloso. No por no estar con las familias, que ya estarían luego, sino por lo bonito y maravilloso de que estuvieran juntos.
—Algunos jugadores están terminando la temporada y otros empezándola. ¿De qué forma se mezcla eso?
—Van a ser entrenamientos casi individualizados, con distintas cargas de trabajo. Pero por encima de todo quiero transmitir la tranquilidad a los clubes, a la gente y a los jugadores de que lo que va a prevalecer por encima de todo es la salud y la integridad física de los jugadores, no vamos a correr riesgos con ninguno. Tener a 22 de un nivel tan importante me da tranquilidad y nos permite poder rotar con total garantía. Salvaguardaremos la salud de los futbolistas, más aún con una climatología tan dura y con partidos cada tres días. —Marco Asensio es uno de los mayores de 24 años y no estuvo en la Eurocopa de 2019. ¿Por qué lo lleva? —¡Es que es muy bueno! Así de sencillo. Siempre he mostrado predilección por él porque me parece un futbolista diferente. Siempre ha tenido predisposición para estar con nosotros. Cuando tomó aquella decisión en 2019 lo entendí, hay que estar en el pellejo de un futbolista. Lo respeté. Estuvo siempre muy cerca, mostrando su apoyo, siempre le sentí así. Es una oportunidad para la Selección y para él de poder reivindicarse y decir ‘aquí estoy yo’, de demostrar lo grandísimo futbolista que es. —¿Entiende el caso de los clubes que no han dejado a sus jugadores acudir? El de Mayoral es el más llamativo, porque venía de tener vacaciones… —Están en su derecho, lo respeto, he estado en clubes y sé el trastorno de que llegue un jugador avanzada la pretemporada. Pero es privarle de un acontecimiento único e irrepetible en su vida, donde va a ganar prestigio y normalmente estos eventos producen un efecto muy positivo, el crecimiento del futbolista en estos torneos es mayúsculo.
—La gente dice que vaya equipazo llevamos… ¿Preocupa el exceso de euforia?
—No… Me preocuparía que me dijeran ‘Luis, el equipo es un poco regular’ (risas). Confío al 100% en este grupo. Vivimos una situación límite en el Europeo, aprendimos de ello y maduramos. Estaba confiado de que el equipo pasaría. Este equipo nunca va a fallar. Vamos a ser competitivos, entregados y orgullosos de representar a nuestro país en un acontecimiento tan importante. —¿Cómo ve el grupo que ha tocado con Egipto, Australia y Argentina? Es muy traicionero…
—Es un campeonato del mundo Sub-24, estamos las 16 mejores. Solamente llegar hasta aquí es un éxito. Los rivales son de un nivel altísimo. A
Luis de la Fuente visitó la redacción de AS y dos cosas le llamaron especialmente la atención: la camiseta de Marcelino de la final de la Eurocopa de 1964 (ver foto a la derecha) y los tomos de AS, donde se almacenan todos los ejemplares, porque ahí estaban los que cuentan su etapa como jugador. Además, durante la entrevista recibió preguntas por vídeo (puede verse completa en As.com) de cinco personas especiales para él: Luis Rubiales (presidente de la Federación), Kiko (campeón olímpico en el 92) y tres de sus jugadores (Dani Olmo, Ceballos y Álvaro Fernández). El presidente le recordó una anécdota del último Europeo y le preguntó si ellos dos, laterales izquierdos
nivel internacional la gente no se da cuenta de la gran igualdad que existe, no tiene nada que ver con los clubes. Seguramente en un club español con uno egipcio, hay más diferencia. Aquí cualquier detalle te deja fuera. No tenemos margen de error, necesitamos la mejor de nuestras versiones. Somos conscientes de que conseguir medalla es muy difícil, cualquiera de las 16 está preparada.
—¿Hay alguna selección mejor que España?
—Mejor, no. Lo digo desde el respeto a todas. Pueden estar como nosotros. Argentina, Alemania… Pueden ser similares, mejores no. Eso le transmito a mis jugadores.
—Usted jugó con falso nueve en la Eurocopa Sub-21. ¿Planea repetir?
—Llevamos una línea de ataque muy versátil. Podemos jugar con nueve, sin nueve, con extremos naturales o a pierna cambiada, con centrocampistas con llegada… Tenemos posibilidades de modificar, cambiar…
—¿Le ha sorprendido la evolución tan rápida de Pedri? ¿En qué posición le ve? —Ha tenido una explosión futbolística que nos ha sorprendido a todos. Pensábamos que tenía un potencial tremendo, pero su aparición en Primera, en un club como el Barcelona, y jugar con esa naturalidad y esa soltura es impropio de un chico de su edad. Tiene tanto talento que puede jugar cerca del delantero o más cerca de la creación, más atrasado. Lo que me gustaría es que tuviera más finalización. Me gusta verlo cerca del área, porque tiene ese último pase que sólo ven algunos jugadores, que están tocados por esa varita de Dios. en su época de futbolistas, tendrían sitio en esta Olímpica. “Por supuesto que sí, toda la banda para nosotros”, dijo De la Fuente entre risas. Kiko le pidió que contara las claves para volver a ganar, mientras que Olmo, Ceballos y Álvaro bromearon sobre la comida y le pidieron al técnico comprometerse a invitar a productos de su tierra si ganan...
Me gustaría que tuviera una capacidad goleadora importante porque tiene condiciones para alcanzar un número de goles importantes.
—El tema de la comida, ¿cómo lo han planeado? ¿Llevan su cocinero como normalmente?
—No podemos, las normas para entrar en Japón son tremendamente rigurosas. Hay un límite de pases y acreditaciones, inalterables. Además, yo viví una cosa en los Juegos del Mediterráneo, una gran enseñanza: el espíritu olímpico. Compartir todo, hacer cola en el comedor… Nosotros tuvimos la fortuna de estar con Mireia Belmonte. Nosotros y ella haciendo cola con normalidad. Eso es una gran enseñanza, no nos tienen que privar de ese lujazo de hacer cola detrás de los grandes deportistas. El primer día les explicaré la experiencia que vamos a vivir, no tiene nada que ver con un Mundial o una Eurocopa. Somos unos afortunados. Sé que van a estar felices, por supuesto que nos va a enriquecer a todos en el plano humano. Respetaremos unas normas que no cuestan nada. Lo entenderán con normalidad, van a aceptar esa convivencia con total naturalidad y será muy fácil. —Para terminar… ¿Se conforma con algo que no sea el oro?
—Ahora mismo no. Nunca vamos a perder porque vamos a dejarnos la piel en el campo y los españoles estarán orgullosos de este grupo. Nos podrán ganar e incluso quedar por detrás en el marcador, pero no vamos a perder nunca. Vamos a ir a ganar y a luchar por lo máximo, con todo el respeto por los rivales.
Pedri “Jugar con esa naturalidad y esa soltura es impropio de su edad”
Ambiente “Hacer cola en el comedor con grandes deportistas es un lujo”